Estas son las nuevas incorporaciones a la Guía MICHELIN España: alkostat (Barcelona), La Balabusta (Barcelona), Capet (Barcelona), Deliri (Barcelona) y Virens (Barcelona).
alkostat (Barcelona)
Si aún no ha oído hablar de la histórica fábrica de cervezas Moritz y de su "resurrección" como complejo gastronómico ya está tardando en acercarse para tomar unas cañas y ver la rehabilitación realizada por el arquitecto francés Jean Nouvel, más conocido en Barcelona por ser el responsable de la famosa Torre Glòries (conocida anteriormente como Torre Agbar). Allí, sobre la cervecería, se encuentra el restaurante “alkostat”, instalado en una antigua vivienda que hoy sorprende por su original fusión entre el estilo decimonónico barcelonés y el diseño vanguardista. El local, que comparte espacios y cocina con el restaurante Alkimia (una Estrella MICHELIN), tiene también tras los fogones al chef Jordi Vilà, que aquí defiende una carta de raíces catalanas más accesible, a base de tapas y platillos pensados para compartir. Encontrará platos clásicos y a la brasa que conviven con sabrosos arroces, cocas, niguiris, elaboraciones "efímeras"... e incluso especialidades de caza en temporada.
La Balabusta (Barcelona)
Se halla en pleno Eixample y supone una auténtica sorpresa, tanto por la singular estética del establecimiento como por su propuesta culinaria. El local, con la fachada en chaflán, presenta un ambiente sencillo y un tanto industrial, con la cocina semivista, pequeñas mesas desnudas en mármol y unas llamativas sacas de harina completando la decoración. La chef Ronit Stern, natural de Haifa (Israel), nos transporta con el paladar a los sabores de su tierra y, por extensión, a la gastronomía de Oriente Medio, con platos especiados y ricos en vegetales que aglutinan reminiscencias mediterráneas, sefardíes, asquenazíes y hasta del Magreb, siempre acompañados por un Halla (también Jalá o Challah, el pan trenzado habitual en sus fiestas). Ofrecen un menú del día, una carta con unas 20 elaboraciones y además, los fines de semana, la opción de un brunch. ¿Y eso de La Balabusta? Pues hace referencia, en lengua yiddish, a la mujer que lleva su casa con brío. ¡También tiene una agradable terraza!
Capet (Barcelona)
La cosmopolita ciudad de Barcelona es famosa en todo el mundo por su arquitectura modernista; sin embargo, para entenderla y apreciar los matices de su evolución como urbe, también hay que visitar el casco viejo, lo que aquí llaman Ciutat Vella, con un sinfín de callejuelas que aglutinan historia, cultura, vida, personalidad... y, por supuesto, posibilidades gastronómicas. En una de esas calles, tras unos grandes portalones de madera, se encuentra el restaurante Capet, que posee una estética rústica-urbana, una curiosa distribución al presentar la cocina abierta en la planta baja (se puede comer en torno a ella) y una agradable sala, en el piso superior, desde la que se puede ver parte de lo que acontece abajo. Pero lo que más llama la atención es la sinceridad culinaria del chef al frente, Armando Álvarez, pues ofrece una cocina tradicional actualizada que seduce, al mismo tiempo, tanto por sus acertadas combinaciones como por su sabor. ¡La carta de vinos huye de convencionalismos!
Deliri (Barcelona)
Cuando un negocio levanta la persiana suele llevar tras de sí todo un saco de ganas, confianza e ilusión. Este es el caso de Deliri y de la persona al frente, David Morera, un cocinero de raza que vive la gastronomía con pasión e inequívoca personalidad. El local, al que se accede bajando unos pocos escalones, presenta una estética rústica-actual, con las paredes en ladrillo visto, diversos lienzos de estética contemporánea que aportan notas de color y, en el techo, la tradicional "volta" catalana. El chef David Morera, que siendo más joven debía tener un punto un tanto gamberro, transmite esa alegría y libertad a su propuesta culinaria, propia de una cocina actual-catalana pero con detalles de temporada y pensada para compartir. ¿Un plato singular o curioso? Los Macarras de l'àvia (son "rigatoni" rellenos), creados como homenaje a su abuela y a la época en la que esta se metía con él, siempre desde el cariño, diciéndole que era un macarra en toda regla.
Virens (Barcelona)
Virens, un término latino que significa "verde", da nombre al restaurante pero ejerce también como emblema de una filosofía, esa misma que ha convertido al chef Rodrigo de la Calle en el "domesticador de vegetales". Tras triunfar en Madrid con El Invernadero (una Estrella MICHELIN y Estrella Verde de sostenibilidad), emprende una nueva aventura con este local, ubicado en el céntrico hotel Almanac pero con acceso independiente. Cuenta con una zona de barra, donde vemos al personal preparando los aperitivos y algún plato frío, así como una sala de estilo urbano-casual con las mesas desnudas en mármol. ¿La propuesta? Una cocina en la que las verduras y hortalizas son las inequívocas protagonistas, lo que no quita para que estén bien acompañadas por una selección de sabrosos arroces, carnes y pescados ecológicos. Ofrecen un equilibrado menú ejecutivo al mediodía (de lunes a domingo) y servicio a la carta por las noches. ¡Descubra sus bebidas fermentadas!
Foto de cabecera: Ceviche. © Franco Ferraris/Deliri