Pasan más tiempo en su restaurante que en su casa. Viven en búsqueda de la perfección. Y sus platos valen más de lo que cuestan. La vida de los cocineros con estrella tiene poco de común. No extraña que el cine la encuentre inspiradora. Ni que los cocineros recurran al cine para contar lo que pasa en sus cocinas. A seguir algunos ejemplos.
Un viaje de diez metros (2014) sigue las peripecias de un chef indio desde sus primeros pasos en el restaurante de Madame Mallory, con 1 estrella MICHELIN, hasta su consagración como chef de vanguardia en París, donde está a punto de conseguir la tercera. Un objetivo que intentará alcanzar en el sitio menos esperado.
Los restaurantes con tres estrellas son muy codiciados. A veces, la lista de espera es tan larga que hay que reservar con un año de antelación. ¿Qué pasa si, transcurrido este tiempo, has roto con la persona con la que pensabas ir? Menú degustación (2013) trata de contestar a esta pregunta. Una curiosidad: Joan Roca de El Celler de Can Roca (3 estrellas MICHELIN) realiza un cameo en esta película.
La estadounidense Burnt (conocida como Una buena receta en los países de habla hispana, 2015) gira en torno a la obsesión de un chef por conseguir su tercera estrella. En esta película se establece un atrevido paralelismo entre el sistema de puntuación de la guía y la Guerra de las Galaxias. Para tener una estrella, dice uno de los protagonistas, hay que ser como Luke Skywalker. Para tener dos, como Obi-Wan. Para tener tres, como Yoda. O quizás como Darth Vader.
En algunos casos, la obsesión de un chef por las estrellas MICHELIN da lugar a situaciones tragicómicas.
En la película española Fuera de carta (2008) el chef Maxi lidia con problemas familiares, económicos y profesionales con la cabeza puesta en la visita del inspector de la guía MICHELIN que podría conceder a su restaurante la primera estrella. Cuando el inspector llega, nada es como Maxi lo había imaginado.
El chef Alexandre Vauclair es el protagonista de la comedia Comme un Chef El chef, la receta de la felicidad, 2012). Su restaurante tiene tres estrellas MICHELIN, pero la nueva dirección le exige un menú más acorde con las últimas tendencias. En medio de experimentos culinarios, eso sí, algo estereotipados, de cocina tecnoemocional, Vauclair se las arregla para que sus nuevos platos sigan luciendo el máximo reconocimiento de la guía.
Restaurante con estrella se hace y no se nace. Detrás de cada “macaron” MICHELIN hay un trabajo tan complejo e interesante que se merece una película.
ElBulli, el restaurante de Roses (Girona) capitaneado por Ferran Adrià, cerró sus puertas en 2011 con tres estrellas MICHELIN dejando detrás de sí un legado enorme para la alta cocina nacional e internacional. ElBulli: Cooking in progress (2012) o Un día en elBulli (2010) son dos documentales que desvelan los engranajes de una máquina “perfecta” que ha hecho historia. Cerrando durante meses para crear, demostrando que en las texturas y los sabores todavía hay mucho que descubrir y dejando claro que un cocinero puede ser un revolucionario, aunque no tenga armas.
El breve documental Nerua, un viaje a la esencia se centra en el proceso creativo de Nerua (1 estrella MICHELIN), el restaurante de Josean Alija ubicado en Museo Guggenheim de Bilbao.
Soul (2016) se queda en el País Vasco y a la vez viaja a Japón contando y comparando las cocinas de Eneko Atxa, chef de Azurmendi (3 estrellas MICHELIN) en Larrabetzu, Vizcaya y la de Jiro Ono, maestro del sushi y alma de Sukiyabashi Jiro Honten (3 estrellas MICHELIN), un restaurante para diez comensales ubicado en la estación de metro de Ginza, Tokio. Jiro Ono también es el protagonista del famoso documental de 2011 Jiro Dreams of Sushi.
Cooking up a tribute es un documental que relata la gira en América Latina del restaurante gerundense El Celler de Can Roca (3 estrellas MICHELIN). Más ambicioso es El Somni, un proyecto de los tres hermanos Roca que mezcla formatos, géneros artísticos y cinematográficos reivindicando para la gastronomía el lugar entre las artes que se merece.
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