Apenas lleva dos años abierto y en tan poco tiempo, el restaurante 2 Estaciones (Valencia, Bib Gourmand en la guía MICHELIN) ha conseguido hacerse un muy merecido hueco en el panorama gastronómico valenciano.
El proyecto con Iago Castrillón y Alberto Alonso, nació de la necesidad de estos dos cocineros y amigos, que habían coincidido en las cocinas de Ricard Camarena, de seguir ofreciendo buena cocina en el animado barrio valenciano de Ruzafa. Pero no se esperen un gran boato, sino más bien un pequeño restaurante que sabe hacer bien las cosas. 2 Estaciones está concebido como una barra alrededor de la cual se articula el local. La barra, que en realidad es la cocina vista del local, preside una sala rectangular que apenas cuenta con unas siete mesas y una terraza exterior en los meses de buen tiempo. Aquí nada es superfluo. Todo está pensado al cien por cien, porque en un local de aparente sencillez, se forja una muy interesante propuesta gastronómica. Tesón, trabajo, amabilidad y disfrute a raudales, son los sellos que identifican esta casa.
La cocina se basa en la estacionalidad, la contemporaneidad y el respecto al auténtico sabor del producto, en una carta corta pero muy cambiante y la opción de elegir entre dos menús degustación, con una relación calidad-precio que hace de su visita un momento de placer gastronómico. Decimos que la carta es cambiante porque los que de verdad mandan, a la hora de elaborar un plato u otro, son los productores y proveedores. No olvidan la tierra en la que están, pero tampoco de la que vienen (Galicia y Donostia/San Sebastián). Por ello es muy común ver platos que recuerdan a la cocina atlántica como una soberbia Merluza de pincho que cocinan al vapor, acompañada de patata chafada, un pil-pil de su cabeza y jugo de pimientos verdes en salmuera. El resultado es un plato muy representativo de lo que allí se hace. Otros ejemplos son la Bullabesa de pescados mediterráneos, la Coca de lengua de ternera, acelgas y salsa tártara, un mar y montaña de Sepia, mollejas y repollo asado y fermentado integrados a la perfección en un plato, o una jugosa Albóndiga de vaca vieja con gnoccis y champiñones. Pidan pan porque en este restaurante lo elaboran ellos mismos. Cada día, cuecen hogazas gallegas de masa madre para disfrute de todos los comensales. Entre los postres un refrescante Milhojas de manzana y vainilla o Zanahoria, naranja y jengibre son algunos de los ejemplos con los que poner el broche final a una fantástica comida.
En pos de abrirse al barrio que les acoge y de ofrecer ese espíritu gallego que les caracteriza, organizan 'Pulpadas y vermús', unas jornadas de aperitivos con diferentes tipos de vermú y tapas como un Pulpo a feira, Gildas, Patatas bravas, Tortillitas de Camarones o Tacos de steak tartar. Conviene estar atento a sus redes sociales, pues es donde anuncian cuando será la próxima.
Si se encuentran en Valencia, visiten 2 Estaciones. ¡No les defraudará!
Foto: Macarena Escrivá
