En lugares así es difícil sentir que estamos en un hotel, al menos no a la manera que solemos entender. El acostumbrado pasillo con su sucesión de puertas todas iguales –excepto por el número– y el mobiliario uniforme desaparecen aquí para dar paso a unas habitaciones personalizadas, pues todo se ha elegido con esmero para crear una atmósfera única y acogedora.
Estos hoteles tienen personalidad. Aquí y allá se percibe el cariño y la dedicación con la que ha sido decorado cada rincón. Es como si entráramos en la casa de veraneo de un multimillonario ibicenco con un gusto irreprochable; solo nos queda olvidar las prisas, curiosear por el lugar, ponernos las zapatillas y el albornoz… y relajarnos.
Es de esperar que cualquier hotel boutique de lujo ofrezca los mejores acabados y el mayor cuidado del detalle. Eso por descontado. Lo que no esperaríamos de un hotel en las Baleares, con toda la belleza que ofrece la naturaleza a su alrededor, es el extremo cuidado puesto en cada detalle del interior.
1. FINCA SERENA - Mallorca
Escondida en un terreno de 40 hectáreas cubierto de olivos, cipreses, campos de espliego y viñedos, Finca Serena combina el estilo arquitectónico tradicional con el diseño contemporáneo. Las habitaciones –con techos de vigas, puertas arqueadas y paredes encaladas– componen un telón de fondo simple para una combinación de muebles, de estilo antiguo y moderno, y una relajante paleta de colores dominada por el gris y la madera natural.
2. MENORCA EXPERIMENTAL - Menorca
Las habitaciones de Menorca Experimental han sido diseñadas por Dorothée Meilichzon, cuyo trabajo es tan brillante bajo los techos de madera de estos edificios rústicos como en los hoteles más urbanos que la cadena posee en Londres, París o Venecia. El resultado se mantiene fiel a la esencia de la finca decimonónica, confiriéndole una inconfundible identidad contemporánea.
3. CRISTINE BEDFOR - Menorca
El diseñador Lorenzo Castillo ha decorado las estancias de Cristine Bedfor con antigüedades y objetos cuidadosamente seleccionados con el fin de conferir al lugar esa atmósfera que impregna los mejores hoteles de pequeñas dimensiones. Cristine Bedfor, el alter ego imaginado por la hotelera Cristina Lozano, es una señora inglesa a la que le encanta recibir amigos en su casa de huéspedes menorquina, decorada al estilo de una casa de campo británica ideal.
4. ES RACÓ D'ARTÀ - Mallorca
Muchas de las antiguas granjas de las Baleares han sido transformadas en lugares de vacaciones en los que priman el lujo y la privacidad. Aun así, Es Racó d’Artà logra destacar entre todas. A ello contribuye tanto el tamaño de la finca –que además de la masía acoge una veintena de casas y casitas desperdigadas a su alrededor– como lo exquisito de su diseño, obra del conocido arquitecto balear Toni Esteva.
5. LA TORRE DEL CANÓNIGO - Ibiza
Una torre del siglo XIV en una atalaya del casco histórico de Ibiza; ese es el punto de partida de este impresionante y elegante hotel boutique. Las habitaciones y suites, todas de ensueño, destacan por su amplitud y por combinar el estilo clásico con comodidades contemporáneas. Si a ello añadimos que las torres eran construidas normalmente para otear el horizonte, es fácil de imaginar las espectaculares panorámicas que ofrece La Torre del Canónigo, un lugar frecuentado por una clientela de lo más selecta.
6. HOTEL CAN CERA - Mallorca
Al llegar a Can Cera pasando por debajo de su antiguo arco de piedra y adentrándose en su frondoso patio central, se descubre un oasis particularmente acogedor dentro del ya elegante enclave mediterráneo de la vieja ciudad amurallada de Palma de Mallorca. Un poco más adelante, subiendo una escalera de mármol, nos aguarda una sucesión de cómodos salones con cálidos rincones en los que disfrutar de un momento de calma antes de descansar en una de sus doce habitaciones.
7. CAN BORDOY GRAND HOUSE AND GARDEN - Mallorca
La arquitectura antigua de Can Bordoy, compuesta por dos edificios del siglo XII declarados de interés, confiere a sus interiores un sabor muy histórico. Aun así, este lujoso hotel boutique de alta gama sabe ser tan contemporáneo como el que más. Responsable de ello es su identidad visual, caracterizada por la mezcla de antigüedades clásicas y piezas de diseño ultramoderno, y su nivel de confort, sutilmente high tech y totalmente acorde con los estándares actuales.