Viajes 7 minutos 17 enero 2025

2 días en Girona

Recorremos la capital de la última provincia de la costa mediterránea, antes de la frontera francesa, para descubrir su rico patrimonio gastronómico.

Cuando pensamos en viajar a tierras catalanas, la primera ciudad que nos viene a la mente es Barcelona. Sin embargo, la riqueza patrimonial, cultural, paisajística y gastronómica de esta comunidad la encontramos en cualquiera de sus rincones. Más allá de la Costa Brava, de sobra conocida por sus espectaculares playas y su litoral salvaje, la provincia de Girona alberga un lugar de imprescindible visita: la ciudad que toma su nombre.

A tan solo una hora y media en coche de la Ciudad Condal, Girona nos invita a realizar un viaje en el tiempo de más de 2000 años a través de su historia. Fue sede romana, acoge uno de los mayores y mejor conservados barrios judíos de España y es cuna de interesantes monumentos artísticos.

Pasear por sus preciosas calles y plazas porticadas es obligado, al igual que la visita a las Casas del Oñar, situadas en el tramo de la Rambla y la calle Argenteria, en pleno Barri Vell. Entre sus fachadas, destaca la Casa Masó, del arquitecto Rafael Masó i Valentí, símbolo del novecentismo gerundense. Y un dato más: Girona ha sido el escenario de varias películas y series.

Garrofón verde con demi-glace de col, chucrut, kale y erizo ahumado del Celler de Can Roca © Joan Pujol Creus
Garrofón verde con demi-glace de col, chucrut, kale y erizo ahumado del Celler de Can Roca © Joan Pujol Creus

¡Únete a nuestra comunidad de foodies y viajeros! Crea tu cuenta gratuita para disfrutar de una experiencia 100% personalizada, con ventajas exclusivas para descubrir, reservar y compartir tus restaurantes y hoteles favoritos.


Entre fogones

Uno de los aspectos que no hay que perder de vista en nuestra ruta es el gastronómico. Girona ciudad se sitúa en el radar culinario de paisanos y foráneos gracias a los hermanos Roca, el triunvirato que lidera El Celler de Can Roca, galardonado con tres Estrellas MICHELIN y una Estrella Verde. El restaurante fue considerado, hace unos años, el mejor del mundo. Sin duda, es uno de los establecimientos con mayor repercusión a nivel nacional e internacional del país y un punto de peregrinaje para los apasionados de la cocina.

La gastronomía gerundense nace en el mar, la montaña y la huerta, en los paisajes de su entorno, lo que redunda en un recetario que refleja esa diversidad geográfica. El mar y montaña es un plato típico, habitualmente elaborado con pollo y cigalas guisados en una cazuela de barro, aunque se pueden encontrar versiones con ingredientes distintos. Otra receta común es el suquet de pescado, cocinado con rape y gambas o con setas. Estos hongos son protagonistas de otro plato frecuente en las mesas de los gerundenses, el estofado de ternera. Asimismo, es tradicional la butifarra dulce, los embutidos o la tortilla de flor de calabacín.

Xuixo de crema, típico dulce en Girona © nito100/iStock
Xuixo de crema, típico dulce en Girona © nito100/iStock

La provincia luce diferentes productos con certificado de origen, imprescindibles en cualquier recorrido gastronómico. Cuentan con Indicación Geográfica Protegida (IGP) la ternera de los Pirineos Catalanes, el queso de la Garrotxa, la manzana de Girona, el Pa de Pagès Català o la ratafía. Y tienen Denominación de Origen (D.O.) el queso y la mantequilla del Alt Urgell y la Cerdanya, el aceite del Empordà, los fesols de Santa Pau y la mongeta del ganxet. Para maridar estos manjares, están los vinos del Empordà.

El guiño a la repostería lo añade el xuixo, uno de los dulces característicos de la provincia. Se trata de una masa frita en aceite de oliva que, posteriormente, se rellena de crema.


Día 1: Centro histórico

Mañana

Nuestro recorrido comienza en la Catedral de Santa María de Girona, símbolo de la ciudad. El edificio, situado en el punto más alto del municipio, posee la segunda nave gótica más ancha del mundo, y su claustro es uno de los más importantes de Cataluña. Para acceder al monumento hay que subir 90 escalones, los mismos que sirvieron de escenario para la serie Juego de Tronos. A cinco minutos, entre la Catedral y la basílica gótica de Sant Feliu, se esconden los Baños Árabes, un complejo con zonas de agua fría y caliente, del que se tienen noticias desde el año 1194.

Catedral de Girona con sus 90 escalones © bloodua/iStock
Catedral de Girona con sus 90 escalones © bloodua/iStock

Comida

Una vez finalizadas las visitas turísticas, haremos una parada técnica en Nexe, donde comeremos. El establecimiento está liderado por Albert Izquierdo, Hugo Cuenca y Núria Berruezo, herederos del antiguo Nu. Trabajan con la estacionalidad y la mayoría de los productos son de proximidad. En cuanto a qué tipo de gastronomía practican, prefieren huir de etiquetas. “No es una cocina japonesa, ni sudamericana ni tan solo mediterránea. Es nuestra propia cocina”, definen. Y añaden “Queremos transmitir valores, comunicar una cultura gastronómica y crear un vínculo bidireccional entre los clientes y la ciudad de Girona. También con los proveedores, el medio ambiente y con el propio personal”. Disponen de menú degustación, pero también se puede comer a la carta.

Guisantes lágrima de Llavaneres ahogados con morcilla negra, trufa y yema de huevo © David Aparicio/Nexe
Guisantes lágrima de Llavaneres ahogados con morcilla negra, trufa y yema de huevo © David Aparicio/Nexe

Tarde

No hay nada mejor después de una comida que un paseo. Aprovechando nuestra ubicación, nos perderemos por las estrechas calles empedradas del barrio judío, el Call, considerado uno de los mejor conservados de Europa. Si queremos más información acerca de su cultura, podemos escaparnos al Museo de Historia de los Judíos o al Instituto de Estudios Nahmánides.

Siguiendo la calle de la Força, la del museo judío, encontraremos la Pujada de Sant Domènec, en cuyas escaleras se rodaron algunas escenas de la película El Perfume. En esta zona también se hallan otros puntos de interés, como los Palacios de Carlemany y los Agullana o la iglesia de Sant Martí Sacosta.

Entre calle y calle, podemos merendar en Rocambolesc, un proyecto de Jordi Roca y Alejandra Rivas, con una creativa carta de helados, sorbetes y polos, complementada con dulces como carambinas, chocolates y golosinas. La leche que utilizan para elaborar sus productos es ecológica, de la granja La Selvatana, comprometida con la sostenibilidad desde el ganado hasta la producción. Cerca también se encuentra Casa Cacao, ideal para las meriendas o desayunos de los apasionados del chocolate.

Pujada de Sant Domènec © aluxum/iStock
Pujada de Sant Domènec © aluxum/iStock

Cena

No se puede visitar Girona sin comer o cenar en El Celler de Can Roca. Los tres hermanos Roca forman una orquesta culinaria perfecta. Joan en cocina, Josep en los vinos y Jordi en los postres conforman una oferta que destila creatividad, sabor, memoria y territorio. Pero al margen de su gastronomía, uno de los valores más destacables es el liderazgo de proyectos que abogan por la sostenibilidad, como Roca Recicla, Tierra Animada o el huerto de Mas Marroch. Todos ellos destinados a proteger, promocionar y mantener el patrimonio gastronómico del entorno. No en vano, lucen, además de las tres Estrellas MICHELIN, la Estrella Verde.

Uno de los postres de El Celler de Can Roca © Joan Pujol Creus/El Celler de Can Roca
Uno de los postres de El Celler de Can Roca © Joan Pujol Creus/El Celler de Can Roca

Hotel

Para alojarse en este primer día en el corazón histórico y comercial de Girona, nuestra propuesta es el Hotel Nord 1901 Superior, situado en un edificio antiguo, completamente restaurado en el 2009. Ofrecen bicicletas por si nos apetece descubrir su entorno dándole al pedal.



Día 2: Muralla, río y zonas verdes

Mañana

Después del desayuno en el hotel, dedicaremos las primeras horas de la mañana a recorrer la muralla de la ciudad, desde donde se disfruta de unas magníficas vistas del municipio. El paseo puede empezar en la Catedral y seguir hacia la torre Gironella y la torre de Sant Domènec. Dejamos atrás la muralla, para continuar por la calle del Carme hasta llegar al Pont de Pedra, desde donde es posible admirar el río Oñar.

Tras la parada, volvemos a nuestra vía principal para alcanzar la Rambla de la Llibertat, que culmina en el puente de les Peixateries Velles, un lugar ideal para contemplar las coloridas Casas del Oñar. Si cruzamos el río, encontramos la plaza de la Independencia.

Quienes deseen seguir andando, pueden bordear el Oñar hasta llegar a la calle del Bellaire. El recorrido por esta vía nos llevará al monasterio de San Pedro de Galligants, una antigua abadía benedictina, y al monasterio de San Daniel.

La Rambla de la Llibertat © BrasilNut1/iStock
La Rambla de la Llibertat © BrasilNut1/iStock

Comida

La hora de la comida la disfrutaremos en Cipresaia, un restaurante de aire informal que ofrece una cocina tradicional y sencilla, liderado por Marc Boronat y Xavier Carol. El establecimiento toma el nombre y el espacio del emblemático primer Cipresaia, inaugurado por el actor Quico Viader y cerrado en 2006. La propuesta se basa en la estacionalidad y va acompañada de una carta de vinos cuidadosamente seleccionados.

El restaurante Cipresaia, en pleno casco antiguo de Girona © Marcela Grassi/Cipresaia
El restaurante Cipresaia, en pleno casco antiguo de Girona © Marcela Grassi/Cipresaia

Tarde

Al margen de la Girona histórica, se encuentra la Girona verde, compuesta por tres parques naturales urbanos: la Devesa, el del Mediodia y el de Ribes del Ter. Existen diversas rutas para adentrarnos en la naturaleza que rodea la ciudad.

Si optamos por dedicar la tarde a las compras, el eje comercial se extiende desde la calle de la Barca hasta la calle de Emili Grahit, entre el núcleo histórico y el ensanche.

También podemos acercarnos al concurrido Mercat del Lleó para buscar productos locales. Con 60 paradas, es el punto de encuentro de cocineros y gerundenses. Aparte de este mercado, hay el de las Orillas del Ter, con unos 200 puestos al aire libre, todos los martes y sábados, en el parque de la Devesa. En ambos casos, es obligado visitarlos por la mañana. Además, el primer sábado de cada mes se organiza una feria de alimentación artesanal en la Rambla de la Llibertat.

Fachada del Mercat de Lleó © BrasilNut1/iStock.
Fachada del Mercat de Lleó © BrasilNut1/iStock.

Cena

Es hora de despedirse de la ciudad, y ¿qué mejor manera de hacerlo que con una buena cena? Una excelente opción es el restaurante Massana, galardonado con una Estrella MICHELIN. Este negocio familiar, dirigido por Pere Massana y Ana Roger junto a sus hijos, ofrece una gastronomía que equilibra la tradición y las técnicas actuales, con un recetario moderno y contemporáneo. Posibilidad de carta y menú degustación.

Otra alternativa se encuentra en Sant Julià de Ramis, a unos 10 kilómetros de Girona ciudad. En este municipio destaca un imponente castillo, una antigua fortaleza militar donde los hermanos Roca han aterrizado uno de sus últimos proyectos: Esperit Roca. El espacio acoge un restaurante de alta cocina, que reinterpreta los clásicos del Celler, y acaba de ser reconocido con una Estrella MICHELIN. También incluye un hotel con 15 habitaciones, una piscina, una bodega y una destilería que explora la cocina líquida del Celler, inspirada en el paisaje. Además, cuenta con una exposición que recorre la trayectoria de los tres hermanos. Todo un universo gastronómico y cultural en un solo lugar, diseñado para poder entender, degustar y disfrutar del mundo Roca.

Uno de los postres del restaurante Massana © Massana
Uno de los postres del restaurante Massana © Massana

Hotel

Para descansar después de dos intensos días de ruta, salimos de la ciudad y conducimos 30 kilómetros para dormir en el entorno tranquilo del Mas de Torrent Hotel & Spa, con dos Llaves MICHELIN. Se trata de una masía del siglo XVIII rehabilitada con todo tipo de servicios e instalaciones destinadas al relax, desde piscinas (cubierta y al aire libre) hasta tratamientos de spa y wellness, pasando por guardería o incluso médico de guardia. El hotel dispone de una zona para recargar vehículos eléctricos, campo de golf y pista de tenis. Además, ofrece excursiones a bodegas o viñedos y luce el certificado de sostenibilidad Biosphere.

Piscina cubierta del Hotel Mas de Torrent & Spa © Mas de Torrent Hotel & Spa.
Piscina cubierta del Hotel Mas de Torrent & Spa © Mas de Torrent Hotel & Spa.

Último consejo

Para los que no quieren perderse ni un detalle de la gastronomía de la ciudad, prestad atención al primer trimestre del año, cuando se celebra el Fórum Gastronómico de Girona. El congreso es un punto de encuentro de reconocidos cocineros y productores, con diversas actividades, degustaciones, ponencias y talleres.


Direcciones

Mas de Torrent Hotel & Spa. Afueras de Torrent, S/N, 17123 Torrent, Girona. Tel.: 972 30 32 92
Hotel Nord 1901 Superior. Carrer del Nord, 7-9, 17001 Girona. Tel.: 972 41 15 22
Nexe. Carrer d'Abeuradors, 4, 17004 Girona. Tel.: 972 22 52 30 
Museo de Historia de los Judíos. Carrer de la Força, 8, 17004 Girona. Tel.: 972 21 67 61
Instituto de Estudios Nahmánides. Carrer Sant Llorenç, 17004 Girona. Tel.: 972 21 67 61
Rocambolesc. Carrer de Santa Clara, 50 ·17001 Tel.: 972 41 66 67
Casa Cacao. Plaça de Catalunya, 23, 17002 Girona. Tel.: 972 90 59 05
El Celler de Can Roca. Carrer de Can Sunyer, 48, 17007 Girona. Tel.: 972 22 21 57
Cipresaia. Carrer Bonaventura Carreras i Peralta 5 17004 Girona. Tel.: 872 20 82 22
Massana. Carrer Bonastruc de Porta, 10, 17001 Girona. Tel.: 972 21 38 20
Esperit Roca. Carrer Major s/n, Entrada 1. 17481 Sant Julià de Ramis, Girona. Tel.: 872 20 14 43


Suscríbete a nuestra newsletter para recibir un avance de las nuevas direcciones seleccionadas por los inspectores de la Guía MICHELIN, recetas exclusivas de los chefs y mucho más.

Encuentra los mejores restaurantes y hoteles del mundo en la web de la Guía MICHELIN y en su App, tanto para iOS como para Android. ¡Inscríbete, haz su lista de favoritos y realiza las reservas!


Imagen de cabecera: Catedral y casas de colores en Girona © Jorge Fuentes Quero/iStock

Viajes

Seleccione las fechas de su estancia
Tarifas en EUR para 1 noche, 1 huésped