Los hoteles que aparecen a continuación forman parte de la selección de hoteles de la Guía MICHELIN. Cada uno de los más de 5.000 hoteles de esta selección ha sido elegido por nuestros expertos por su estilo, servicio y personalidad únicos. Todos se pueden reservar en el sitio web y la app de la Guía MICHELIN.
Barcelona es un destino turístico tremendamente popular y atesora una sofisticada escena hotelera, conocida en todo el mundo. Si quiere dejar huella, tiene que estar a la altura. Para comprobarlo, basta con mirar hacia arriba y ver la cantidad de excepcionales azoteas con piscinas, bares, restaurantes, soláriums...
Aunque en la mayoría de las ciudades el número de azoteas sigue siendo reducido, en la capital catalana es difícil encontrar un hotel de categoría que no tenga una piscina en su azotea o, al menos, un animado bar de cócteles con terraza para descansar.
Por supuesto, la cosa no acaba ahí. Para entrar en nuestra lista, el resto del hotel tiene que ser tan atractivo como la última planta. Todos los establecimientos aquí citados tienen una azotea fabulosa, pero también... ¡mucho más!
Casa Bonay, Barcelona, España
Cuando llegue a Casa Bonay, si hay algo que notará es que este hotel es un esfuerzo comunitario. Desde los muebles hasta las mantas y el jabón, es un producto puro de Barcelona y de la cultura catalana. Las habitaciones no son enormes, pero todas tienen un espacio exterior donde disfrutar de las vistas. Y en la azotea, el Chiringuito sirve carnes a la parrilla y tapas en un ambiente de club de playa.
HOTEL BRUMMELL, Barcelona, España
En la frontera metafórica entre el diseño industrial más chic y las esculturas luminosas encontramos ahora el Hotel Brummell. Se encuentra en pleno Poble Sec, un barrio donde encontrará multitud de locales de copas y bares de tapas que animan sus coloridas calles. El Brummell es un ejemplo de ello, con cócteles, un menú encantador para tomar junto a la piscina de la azotea y hasta clases, tanto de yoga como de fitness, a disposición de sus huéspedes.
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Almanac Barcelona, Barcelona, España
Justo al lado del Passeig de Gràcia, en el barrio del Eixample, el Almanac Barcelona es un elegante edificio del siglo XIX con una ampliación del siglo XX. El interior, imaginado por el diseñador Jaime Beriestain, evoca distintos periodos míticos de la historia del diseño, desde el Art Déco hasta el modernismo de mediados de siglo y el estilo contemporáneo. La elegancia del diseño va de la mano de un confort de alta gama, incluido el bar Azimuth de la azotea, que ofrece vistas de los tejados de la ciudad tanto desde dentro como desde fuera.
Serras Barcelona, Barcelona, España
Incluso con tanta competencia, el Serras consigue destacar. Aquí, como en cualquier otra ciudad, es difícil encontrar un lugar que consiga combinar con tanta naturalidad lo chic y el lujo de alta gama. El hotel ocupa un distinguido edificio en el Passeig de Colom, entre el Barrio Gótico y el Port Vell. ¿Una de sus bazas más seductoras? Las vistas al puerto deportivo desde su azotea, dotada con piscina, restaurante y bar.
Mercer Hotel Barcelona, Barcelona, España
Pasear por los pasillos del Mercer Hotel Barcelona es como hacerlo por una galería de arte moderno que nunca cierra y en la que te invitan a pasar la noche, salvo que aquí el mobiliario de diseño y las impecables paredes de cristal se encuentran en una torre de defensa medieval. Y cuanto más se sube, más se revela el esplendor del hotel, hasta la terraza del cuarto piso, con sus impresionantes vistas de la Catedral gótica, la piscina de la azotea y el bar.
H10 Cubik, Barcelona, España
El H10 Cubik abre sus puertas en un edificio modernista renovado, en el corazón de la ciudad, que ilustra perfectamente el espíritu arquitectónico aventurero que tiene Barcelona. En su interior encontrarás una cautivadora ambientación contemporánea del diseñador Lázaro Rosa-Violán, pero es en la planta superior donde se halla el Atik Tapas Bar, un restaurante que se explica por sí mismo y con unas vistas impresionantes, así como el Atik Rooftop Bar, con piscina y tumbonas.
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Antiga Casa Buenavista, Barcelona, España
Desde sus inicios como restaurante familiar en Barcelona, entre los céntricos barrios de El Raval y L'Eixample, este establecimiento se ha ido convirtiendo en un elegante y singular hotel boutique. El alojamiento, que sigue siendo un negocio familiar, combina la historia, inspirada en la tradición modernista del siglo XX de la ciudad, y la contemporaneidad, con la sencillez y el cuidado por los detalles propios del diseño hotelero del siglo XXI. En la azotea, una piscina y un pequeño jardín ofrecen un espacio... ¡aislado del resto del mundo!
Kimpton Vividora, Barcelona, España
Hay un largo camino desde San Francisco hasta el Barrio Gótico de Barcelona, pero el Kimpton Vividora se siente como en casa; no en vano, es un hotel boutique de lujo concebido en colaboración con un estudio de diseño local y diseñado como fiel reflejo de uno de los barrios más animados de la capital catalana. Y para introducirse en la escena culinaria local, está Fauna, el restaurante insignia supervisado por el chef Ferran López, y la Terraza de Vivi, el bar de la azotea.
Hotel Pulitzer Barcelona, Barcelona, España
El Pulitzer es abiertamente chic. Sus espacios públicos están revestidos de acogedores sofás, adornados con librerías lacadas y engalanados con una colección de arte contemporáneo y de época. El conjunto es vistoso y elegante, pero desde luego no minimalista. En cuanto a la terraza de la azotea, es un verdadero placer disfrutar en ella de un cóctel mientras se admira la puesta de sol.
Sir Victor Hotel Barcelona, Barcelona, España
Lo primero que llama la atención es la fachada del hotel Sir Victor, diseñada por el arquitecto Juli Capella, con sus paneles de piedra caliza que parecen abrirse como las páginas de un libro para dejar entrar la luz del sol en las habitaciones. El hotel es quizás el más relajante de Barcelona, con su spa zen y una piscina en la azotea que ofrece vistas tanto a la Sagrada Familia como a la Casa Milá.
Arai Aparthotel, Barcelona, España
En este edificio del siglo XVIII, que conserva sus esgrafiados originales, a medio camino entre el fresco y el grabado, los materiales siguen expresándose con naturalidad en todas partes, con vigas vistas que dan a las habitaciones más grandes un aspecto cavernoso y techos altos que juegan a favor del tamaño de los ventanales. La piscina exterior no es precisamente olímpica, pero resulta tan elegante como el resto del hotel.
Hotel 1898, Barcelona, España
Ubicado en el edificio que fue sede de la Compañía de Tabacos de Filipinas, este hotel urbano tiene un claro aire de resort, aunque situado en la esquina de Pintor Fortuny con las Ramblas (la famosa calle comercial de Barcelona). Una de las dos piscinas del hotel está en la terraza, junto al bar de cócteles donde también se sirven tapas caseras.
The One Barcelona, Barcelona, España
The One tiene todo el refinamiento de un hotel de cinco estrellas. El edificio y sus 89 habitaciones están revestidos de mármol, espejos y acabados dorados compuestos con gusto, obra todo del interiorista Jaime Beriestain, cuyo estudio también diseñó gran parte del mobiliario. Pero si lo que le gustan son las vistas panorámicas diríjase a la azotea y su piscina, pues ofrece una visión inmejorable del skyline de Barcelona.
Ohla Eixample, Barcelona, España
Con sus motivos geométricos, la fachada anuncia de inmediato su originalidad, al tiempo que oculta un modernismo optimista y utópico a la vez: si el sol mediterráneo no quemara fuera, podría pensarse que se está en Estocolmo o Copenhague. Las habitaciones combinan a la perfección el minimalismo de alta costura con un ambiente cálido; en las zonas comunes, el bar y la piscina de la azotea ofrecen una buena alternativa al restaurante, galardonado con una Estrella MICHELIN.
Foto de cabecera: © H10 Cubik
