Esta encantadora casita rural, llevada con amabilidad por Iñaki Gómez y Lola Palacio (él tras los fogones y ella en la sala), se encuentra en una pequeñísima aldea y encierra toda una forma de vida, pues la pareja hace un esfuerzo titánico para llevar el negocio y cultivar su huerto, justo al lado del restaurante.
Le ponen muchísimas ganas y profesionalidad, esenciales a la hora de ofrecernos una propuesta que ve la luz en tres exclusivos menús (Castiello, Rodiles y Alenda, un término astur que podríamos traducir como "tomarse un tiempo para respirar") donde la tradición y los auténticos sabores asturianos toman el protagonismo. La oferta, dominada por los pescados que llegan a diario de las cercanas lonjas de Lastres y Tazones, así como por las fantásticas carnes asturianas, sigue las directrices de una culinaria contemporánea, con finas texturas y elegantes presentaciones. ¡Siempre encontrarás verdura fresca, así como flores y hierbas cortadas pocos minutos antes de cada servicio!