Los hoteles que aparecen a continuación forman parte de la selección de hoteles de la Guía MICHELIN. Cada uno de los más de 5.000 hoteles de esta selección ha sido elegido por nuestros expertos por su estilo, servicio y personalidad únicos. Todos se pueden reservar en el sitio web y la app de la Guía MICHELIN.
Sevilla es mediterránea en su energía. Vibrante, festiva y ecléctica, sabe divertirse y contagiar la alegría de vivir a sus visitantes. Durante el día, las calles empedradas del barrio de Santa Cruz, antigua judería de la ciudad, muestran sus coloridas fachadas, con patios arbolados y terrazas de cafés flanqueadas por alguna que otra fuente. Aquí, también se puede saborear plenamente el estilo de vida mediterráneo. Por la noche, la tranquilidad da paso a un ambiente muy animado: los bares de tapas se llenan, el buen humor se contagia y la ciudad saca a relucir toda su alegría.
Más allá de este carácter mediterráneo, Sevilla fue antaño una ciudad de referencia mundial. Un estatus que exhibe con orgullo en sus suntuosos edificios. Situada a orillas del Guadalquivir, entre el Atlántico y el Mediterráneo, desde Sevilla partió Fernando de Magallanes en 1519 para dar la primera vuelta al mundo (luego emprendieron el gran viaje desde Sanlúcar de Barrameda). Durante este periodo, la ciudad se convirtió en un centro comercial de primer orden, pues aglutinaba mercancías, personas e influencias. A principios del siglo XVI, obtuvo el monopolio del comercio con las Américas recién descubiertas. Fue una época dorada. Las familias sevillanas se enriquecieron con los recursos amasados en el nuevo continente y construyeron espléndidas residencias cuya sutil mezcla de arquitectura gótica, arte morisco, acentos mudéjares y exuberantes jardines aún puede admirarse hoy en día.
Rebosante de vida y cultura, es difícil no caer rendido bajo el hechizo de esta bellísima ciudad. Si tú también quieres descubrirla, aquí tienes algunos de nuestros hoteles favoritos en Sevilla.
Hotel Alfonso XIII
El Hotel Alfonso XIII es... ¡una auténtica reliquia del pasado! Inaugurado en 1928 en previsión de la Exposición Iberoamericana que se celebraría al año siguiente, el hotel recibió el nombre del rey que encargó su construcción y fue diseñado con una opulenta mezcla de estilo barroco y morisco para parecer aún más antiguo. Su intrincada arquitectura (que incluye hermosos azulejos), el mobiliario antiguo, sus espléndidos tonos de mármol y caoba... hacen de éste uno de los hoteles más antiguos e imponentes aún en funcionamiento. Es una joya y está muy alejado del tacaño minimalismo de los hoteles boutique más actuales.
CoolRooms Palacio Villapanés
El Palacio de Villapanés es un reflejo de la hermosísima Sevilla, gran capital del arte, la historia y el folclore, que con el tiempo se ha convertido en uno de los destinos más codiciados de toda Europa. Este esplendor está disponible para pernoctar, ya que el propio palacio se ha convertido en el hotel boutique más popular de toda la ciudad. Todas las estancias, desde las habitaciones hasta los comedores, son una sutil y acertada mezcla de lo antiguo y lo moderno, con muebles de época y de diseño contemporáneo, antigüedades y equipamiento de alta tecnología. No hay duda: belleza y elegancia son las palabras clave cuando se trata de interiores.
Corral del Rey
Cuando se trata de arquitectura clásica y elegante, Sevilla pone el listón muy alto y... ¡el Corral del Rey está a la altura! Con su atrio de tres plantas y sus interiores magníficamente conservados, este antiguo palacio del siglo XVII no se parece a ningún otro. El estilo es radicalmente moderno, pero lo suficientemente sutil como para fundirse a la perfección con las paredes de este soberbio edificio de época.
Hotel EME Catedral Mercer
La mezcla de arquitectura moderna e histórica se ha convertido en un sello de identidad español. Tomemos como ejemplo el Hotel EME Catedral Mercer, situado en pleno centro histórico de Sevilla, frente a la Giralda. Este hotel, con 60 habitaciones, es una hábil mezcla de motivos arabescos, en referencia a la herencia árabe de la catedral, y una decoración interior en piedra y madera. El EME es un reconfortante refugio de la luz y el calor, con una terraza abierta a la agradable brisa nocturna que se levanta al ponerse el sol. Algunas habitaciones tienen vistas a la Catedral y las mejores disponen de jacuzzi, aunque no es imprescindible dada la existencia de piscina en la azotea.
Hotel Mercer Sevilla
No es casualidad que Andalucía recuerde, en algunos detalles, al modo de vida del norte de África. Al igual que Marrakech, Sevilla tiene raíces moriscas, así que no es de extrañar que un hotel como el Mercer Hotel Sevilla tenga cierto parecido con un riad, las casas norteafricanas organizadas en torno a un patio central. El estilo andalusí es ciertamente único, reconocible por la riqueza ornamental de su arquitectura y la sencillez de su decoración, que deja entrar la luz a raudales para iluminar la blancura de sus interiores. Pero el Mercer no es solo tradición. Los aficionados al diseño no dejarán de notar, tanto en el vestíbulo como en las habitaciones, la presencia de un mobiliario moderno particularmente inspirado. El contraste entre la arquitectura del siglo XIX y el diseño del siglo XXI es a la vez vibrante y sutil.
Hospes Las Casas del Rey de Baeza
No es habitual que un hotel pretenda rivalizar con el ambiente eléctrico que reina, por las noches, en las calles flamencas del casco antiguo de Sevilla; sin embargo, el Hotel Las Casas del Rey de Baeza cumple esa promesa... ¡y mucho más! Desde fuera, este hotel es tremendamente clásico, una casa blanca y descolorida del siglo XVIII, de estilo tradicional, en pleno casco histórico de Sevilla. Los interiores, por contra, son absolutamente urbanos y contemporáneos, una isla de diseño moderno en el más pintoresco de los escenarios, bañado por la incomparable luz del sur de España.
Hacienda de San Rafael
A medio camino entre Sevilla y la milenaria ciudad de Cádiz, en plena campiña andaluza, la Hacienda de San Rafael ocupa una finca de cinco acres (algo más de 2 hectáreas) que sigue funcionando como granja, produciendo aceite de oliva junto con lo que ahora es un próspero negocio de hostelería. Las amplias habitaciones son una mezcla ecléctica de elementos andaluces, indios y zimbabuenses. Por su parte, las Casita Suites y las Pool Suites suben de nivel. Son auténticas villas, cada una con su piscina privada, y proporcionan una experiencia residencial autónoma a la par que lujosa.
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