Carneros Resort and Spa

Por fin algo diferente al estilo toscano-provenzano que parece imperar en la región vinícola de California. El Carneros Resort and Spa, enclavado al sur de Napa, cerca de San Francisco, es un hotel bastante más moderno, en el que se respira una especie de minimalismo rústico, más inspirado en la región central y nororiental de los Estados Unidos que en Europa.

Los edificios del Carneros suelen provocar entusiasmo o rechazo. Los tejados de metal ondulados de las casitas son llamativos a la par que sencillos y encajan perfectamente en el paisaje de las colinas ondulantes y las extensas tierras de labranza. A los interiores, en cambio, nadie podría ponerles ninguna pega. Las casitas no se caracterizan por la desmesura de otros tipos de alojamiento de la región vinícola, sino que son sencillas, elegantes y lujosas y están equipadas con todo lujo de artículos electrónicos modernos, magníficas duchas al aire libre y en el interior y patios con jardines privados y calefactores de gas, porque las noches californianas suelen ser frescas.

Si a todo esto le sumamos una larga piscina al aire libre con unas vistas idílicas a los viñedos, un spa que no tiene nada que envidiar a ninguno de los de la región vinícola y el Farm, un restaurante de cocina californiana que se abastece de productos de la zona, el resultado es una opción digna de tenerse en cuenta. Cierto que sobre gustos no hay nada escrito, pero siempre que no le asuste la arquitectura moderna, aquí no tendrá ninguna queja.