Tortilla de papa y bresaola wagyu, Ñoqui a la sorrentina, salsa de tomates reliquia, mozzarella y albahaca, Capelletti de queso de cabra, ricotta, azafrán y limón… Este restaurante, no muy lejos del mítico Estadio Monumental donde juega el Club Atlético River Plate, está en boca de todo el mundo, tanto por su oferta gastronómica como por el hecho de que su chef-propietario, Máximo Togni, también es un empresario de éxito que vivió varios años en Estados Unidos y llegó a estar tras los fogones de la embajada argentina en Washington. ¿Qué nos proponen? Una carta italo-porteña bastante nutrida y atractiva, con masas artesanales personalizadas para cada tipo de pasta, rellenos de gran calidad y unas milanesas de esas que se quedan en el recuerdo, como la Milanesa napolitana de lomo que sigue la receta de su abuela Evelia, esa mujer que le marcó y que presta su nombre a este moderno local, con la cocina abierta a la sala. ¡El chef ofrece lo que él mismo comería a diario!