Château Saint-Martin

El Château du Domaine St Martin está esculpido en la ladera de un monte, en lo que fue en su día una fortaleza, y domina desde lo alto la Riviera Francesa. Goza de una ubicación única en las afueras del pueblo de Vence, a medio camino entre Cannes y Mónaco, y a solo 20 minutos del Aeropuerto Internacional de Niza-Costa Azul.

La Provenza es una región donde escasean los alojamientos en castillos. En el Château du Domaine St Martin no te sentirás abrumado por el espíritu provenzal, con la excepción de los frutales y la lavanda que crecen en los jardines de esta llanura que se asoma a la Riviera. Se trata de un hotel que, aun siendo clásico, constituye una versión actualizada del lujo y la elegancia franceses. De hecho, incluso dispone de un aparcamiento subterráneo. En 1997 una nueva ala fue incorporada al edificio principal, que está rodeado a su vez por seis villas privadas. Todas las suites y villas ofrecen unas vistas espectaculares al mar, gracias a la magnífica ubicación del hotel; si bien la brisa marina no podrá acariciarte la piel puesto que el océano se encuentra a unos 12 kilómetros de distancia.

Ahora bien, si lo que buscas es sentir la brisa marina, la Riviera dispone de alojamientos en primera línea de playa. El Château du Domaine St Martin te ofrece la oportunidad de vivir una experiencia totalmente diferente: en el castillo te sentirás literalmente por encima de las bulliciosas muchedumbres y de las multitudes que toman el sol en las lejanas playas.

Las habitaciones son, sobre todo, espaciosas, siendo las Junior Suites las más pequeñas. Las villas privadas son muy amplias, con dos o tres habitaciones, y están ubicadas muy cerca del castillo, en lo alto de una colina. Desde sus inmensas terrazas los huéspedes podrán disfrutar de unas vistas espectaculares a la Riviera. Todas las suites, villas y demás habitaciones están equipadas con aire acondicionado, cuartos de baño de mármol, muebles antiguos y tejidos de primera categoría. Al fin y al cabo, estamos en Francia.

El castillo está rodeado de exuberantes jardines, ideales para disfrutar de un agradable paseo por la naturaleza, y pone a la disposición de sus huéspedes una piscina y varias pistas de tenis de tierra batida, que sin duda os mantendrán entretenidos. Los más aventureros pueden decantarse por un tour en helicóptero que parte desde el helipuerto privado del hotel.

Sin embargo, el punto estrella es sin duda la gastronomía. El Saint-Martin, que es todo un referente, sirve platos tradicionales de la Provenza en una terraza con impresionantes vistas de Vence, el cabo de Antibes y la bahía de los Ángeles. Aquí, tanto los huéspedes del hotel como los gourmets locales podrán disfrutar de preciosas vistas con el borboteo de la fuente de fondo. La Rotisserie, con cocina abierta y una terraza panorámica, se ha renovado recientemente. L’Oliveraïe es el asador de verano cuyas mesas están bajo un olivo centenario.