Maison Souquet

Admitiendo que un hotel pueda ser sexy, no es este precisamente el tipo de hoteles que escasea en París. Con todo, muy pocos merecen tanto este calificativo como la Maison Souquet, una antigua casa de citas del barrio de Pigalle convertida en hotel cinco estrellas por Jacques Garcia. Aquí, frente al Moulin Rouge, el aclamado diseñador ha creado un lugar envuelto en la fantasía y el misterio, un escenario opulento y un tanto irreal pensado para quienes desean escapar del tedio de la vida cotidiana.
Quizá te preguntes qué significa exactamente “casa de citas”. Pues bien, en el s. XIX, aquí se daban “cita” cortesanas, estetas y demás dandis ávidos de placer y aventura… Hoy, los herederos de aquellos hedonistas del pasado disponen de un lugar creado expresamente para ellos, un hotel cuyas habitaciones reciben el nombre de algunas de aquellas cortesanas que encendieron las noches parisinas del s. XIX. Pigalle ha dejado atrás su reputación como barrio rojo, pero eso no significa que tengas que meterte en la cama a las ocho de la tarde, a menos, claro está, que esa sea tu costumbre.
El lujo que propone la Maison Souquet no tiene nada que ver con el dinero o las convenciones. Es un lujo basado en la fantasía y la sensualidad, por lo que es más probable que acoja a parejas en busca de emociones fuertes que a las que tienen una cuenta corriente con muchas cifras (esto, claro está, no quiere decir que estas últimas no cometan travesuras de vez en cuando…). Sus cuidadas habitaciones en tonos oscuros son románticas y elegantes, al igual que sus zonas comunes. El bar, con chimenea e hileras de libros, está inspirado en una sala de lectura. Un lugar muy relajante que, sin embargo, no puede competir en este sentido con el spa, de uso exclusivamente privado. Para descubrirlo, no hay salas de espera, solo una llave que te será entregada y que te abrirá las puertas del rincón más singular y deseado de toda la Maison Souquet.