Hotel de Crillon, A Rosewood Hotel

El Hôtel de Crillon, A Rosewood Hotel es sinónimo de lujo parisino desde 1909, cuando este palacio neoclásico del siglo XVIII abrió sus puertas al público. Siempre ha estado en el punto de mira del público, gracias a su posición privilegiada en la Place de la Concorde, escenario de tantos acontecimientos definitorios de esta ciudad, y gracias al hecho de que se ha mantenido durante todos estos años como quizás el hotel de lujo parisino por excelencia. E incluso en su nueva encarnación, como Hôtel de Crillon, A Rosewood Hotel, sigue siendo tan singular como siempre.

Un equipo de arquitectos, directores creativos y diseñadores de interiores franceses son los responsables de su aspecto actual, e incluso las suites diseñadas por Karl Lagerfeld son fieles al carácter del siglo XVIII del Hôtel de Crillon, A Rosewood Hotel, lo que no es de extrañar, ya que el propio Lagerfeld era un experto en el lenguaje visual de la época. Es extraordinariamente íntimo para un hotel de su categoría, y da la sensación de ser una gran residencia palaciega más que el ajetreo de un típico hotel urbano de cinco estrellas. Y bajo su superficie de época, el Hôtel de Crillon, A Rosewood Hotel está totalmente al día; las habitaciones y suites destilan elegancia histórica, pero son funcionalmente modernas.

Mientras tanto, el deslumbrante spa cuenta con una inolvidable piscina infinita subterránea entre sus impresionantes espacios. Y los restaurantes del hotel invitan a pasar la noche: desde L'Ecrin, de alta cocina, hasta Nonos, del chef Paul Pairet, un asador de estilo francés con una charcutería contigua. El Jardin d'Hiver sirve café y pasteles del chef Matthieu Carlin, y el Bar Les Ambassadeurs sirve champán e inventivos cócteles de temporada acompañados de caviar o rollitos de langosta.