Villa Caletas

Hoy en día, lo que se recomienda para quien viaje a Costa Rica por lo general tiene que ver con el turismo aventurero, tal vez culminando la experiencia en una tirolina, volando sobre la selva húmeda. No suena desagradable si eso es lo que te gusta. Pero también existe una visión más elegante del país, y ahí es donde cabe Villa Caletas, un hotel de influencia francesa escondido en la cima de un acantilado, 300 metros sobre la costa del Pacífico.

Como el propietario es un diseñador de interiores francés, Villa Caletas omite el lenguaje rústico de techos de paja y se rige por una visión más contemporánea, aunque sazonada con antigüedades de la época colonial. Las habitaciones más básicas son confortables, pero distan de ser palaciegas. Sin embargo, las villas y las suites rápidamente se adentran en el mundo de un hotel de lujo: algunas cuentan con piscinas de inmersión y otras con espectaculares vistas desde los jacuzzis de sus baños.

Ese descenso de 300 metros hasta el litoral se hace en coche, lo que significa que Villa Caletas realmente no es un hotel de playa, pero vale la pena hacer el viaje, gracias no solamente al Pacífico sino también al bar y restaurante El Pelícano, ubicado en la playa privada del hotel. Y como la propiedad está aislada, los comensales son un público cautivo; El Mirador, su otro restaurante, es mucho más que adecuado. No te pierdas el anfiteatro griego y sus columnas, que es el escenario para gran parte del entretenimiento por las noches.

Indicaciones para llegar al hotel:
Villa Caletas queda a 90 km (1 h 30 min en coche) desde el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría. Se pueden solicitar traslados por 100 USD por trayecto para hasta cinco huéspedes. Ti necesitas asistencia para tu traslado al aeropuerto, contacta con atención al cliente.