Nomade Holbox

En los últimos años, el auge del turismo ha transformado la isla de Holbox y atraído a gran número de visitantes de todo el mundo hasta este rincón, otrora tranquilo, situado al norte de la península de Yucatán. Cierto que sigue siendo un paraíso tropical –sin coches y ocupado en buena parte por la mayor reserva natural de México, famosa por ser el santuario de los mayores peces del mundo–, pero encontrar paz y tranquilidad en sus playas no resulta tan fácil como antes. Para ayudarnos a ello, el Nomade Holbox es un lujoso refugio de enfoque ecológico reservado al público adulto, agradablemente alejado de las zonas más concurridas de la isla y situado junto a una playa solitaria, pese a lo cual solo necesitarás 15 minutos en carrito de golf para llegar desde la terminal del ferry hasta él.
El centro de todo es el bienestar. Dentro de una estructura bautizada con el nombre de “tienda de la gratitud” se ofrecen tratamientos de sonoterapia inspirados en la cultura maya, ejercicios de respiración y yoga. Y fuera de la tienda podrás disfrutar, entre otras muchas propuestas, de un amplio chiringuito de techos altos contiguo a una zona de descanso a la sombra de las palmeras y a pocos pasos de una extensión de ensueño de mar color aguamarina. La piscina de piedra de la playa es el lugar perfecto para realizar actividades como las ceremonias curativas en el agua o simplemente tomar un cóctel.
Las habitaciones y suites, pensadas como una prolongación del entorno natural, ocupan edificios bajos construidos con materiales autóctonos como la madera y la paja. En el interior, las paredes de lona, los tonos tierra y las texturas naturales evocan el encanto rústico de la isla, mientras que los patios cuentan con bañeras de piedra o cobre. Pero no hay duda de que lo más destacado del Nomade Holbox son sus modernas cabañas en los árboles, cada una con una cama queen size frente al agua, ducha interior-exterior y azotea con vistas de 360 grados de la isla. Las zonas comunes incluyen un restaurante de cocina nikkei.