Casa Clàt

En el corazón de Cagliari, a pocos minutos a pie del puerto deportivo, nos aguarda un lujoso hotel boutique que nos descubre una faceta inusualmente refinada de la capital sarda. Para la función de director artístico, Casa Clàt ha recurrido al artista afincado en Cerdeña STUDIO PILIA que ha empleado un estilo que, aunque elegante y urbano, poco tiene que ver con el interiorismo de lujo que se practica en Milán. Para ser exactos, se trata de una creación única fruto de la fusión de varias épocas y del trabajo de otros muchos artistas, diseñadores y artesanos sardos.

Ni que decir tiene que cada suite es única, no solo por su decoración, sino también por la distribución que impone la antigüedad del edificio. El ladrillo antiguo convive con superficies de hormigón y viejos techos de vigas se despliegan sobre suelos de madera nuevos. El conjunto, sin duda, respira lujo, pero no el lujo estandarizado que encontraríamos en cualquiera de los resorts de golf de la isla.

En otro registro, la cocina sarda, y en concreto la de mar, es uno de los centros de atención. El motivo es claro: los hermanos Claudio y Caterina Murgia, quienes indirectamente dan nombre a Casa Clàt, son los propietarios de la empresa mejillonera Nieddittas, de ahí que, entre otras especialidades sardas, los mejillones estén muy presentes. La diversión se prolonga en el lounge bar y en el coqueto jardín del patio.