Hotel Villa Soro

San Sebastián no es precisamente el primer destino turístico de España, aunque resulta difícil de entender. Quizás se deba a que los escasos turistas que se animan a conocer el norte se decantan por visitar el Museo Guggenheim de Bilbao, pero lo cierto es que muchos, o al menos eso parece, dejan escapar la oportunidad de conocer San Sebastián, con su espectacular bahía y su exquisita gastronomía, que el archiconocido chef catalán Ferrán Adriá ha descrito como una de las mejores de Europa, tal y como avalan las estrellas Michelín; la ciudad alberga nada más y nada menos que siete restaurantes que han sido condecorados con las codiciadas estrellas.
El Hotel Villa Soro se encuentra a las afueras del casco antiguo de San Sebastián, ligeramente apartado del bullicio de la zona comercial y de ocio, en una calle residencial flanqueada por una hilera de árboles. Esta majestuosa villa del siglo XIX –declarada patrimonio histórico de la ciudad-, junto con sus caballerizas de ladrillo visto al más puro estilo inglés, está rodeada de un hermoso jardín francés que se remonta a los orígenes de la mansión. El huésped se encontrará a sólo un corto paseo de la Parte Vieja y a unos cinco minutos a pie de la playa de Zurriola.
Las habitaciones son elegantes, en perfecta consonancia con la majestuosidad de la villa, pero sin dejar de ser contemporáneas. En definitiva, el hotel apuesta por lo tradicional pero sin sacrificar las comodidades de la vida moderna. El huésped podrá disfrutar de espaciosas bañeras en mármol blanco con ducha independiente así como dormitorios individualmente diseñados, decorados con un estilo sobrio y lujoso, con abundante luz natural y obras de arte contemporáneas de artistas locales. El hotel ofrece también todos los servicios propios de la hospitalidad más moderna; la televisión vía satélite y el acceso a Internet son universales, como lo es el acceso a la red.
Lo que no podrá encontrar el viajero en el Hotel Villa Soro es un restaurante, lo cual es en cierta forma una bendición: al fin y al cabo, ¿qué necesidad hay de conformarse con comida de hotel cuando se visita una de las ciudades gastronómicas más importantes del mundo? En lugar de recurrir a chefs, el Villa Soro recurre a sus conserjes para recomendar a sus huéspedes los mejores restaurantes de la ciudad, algo que probablemente los más cínicos considerarán tan fácil como lanzar dardos al listín telefónico, dado el amplio abanico de restaurantes de categoría que existen en San Sebastián. Ahora bien, no nos engañemos, de poco sirven los dardos a la hora de hacer una reserva.