L'Agapa Hôtel - Spa Codage

Los viajeros que buscan una experiencia singular en la costa francesa —definida, en esencia, como lo opuesto a las muchedumbres de la Riviera— se refugian en Perros-Guirec en Côtes-d’Armor. Lugar de origen de las extraordinarias playas rosas y formaciones rocosas de la costa de granito rosa de Bretaña, Perros-Guirec es el escenario de L’Agapa, una fusión sorprendentemente exitosa del espíritu de los años 30 y un ambiente moderno y original al borde del mar.


Cada habitación está equipada con su propio “tótem”, un objeto de arte totalmente funcional que sirve para integrar con estilo una televisión de pantalla plana, un mini bar, las luces y la caja de seguridad. Aunque suena un poco new-age, es un buen ejemplo de cómo el compromiso con el bienestar y la relajación asumido por un hotel que se denomina como zen se convierte en comodidades modernas específicas. Si quedaba alguna duda sobre la rotundidad de la experiencia, debería quedar disipada por el sobrio diseño moderno que favorece las líneas rectas y sencillas, dando un toque sólido y contemporáneo a este escondite costero con aires de jazz.


Muchos hoteles cultivan una relación armoniosa con su entorno, pero L’Agapa riza el rizo en las instalaciones de su spa. Excavado en el granito debajo del hotel, el spa permite contemplar una parte preciosa del Canal de la Mancha, donde se encuentra el archipiélago de las Siete Islas, la reserva natural más antigua de Francia. Aquí, los huéspedes pueden mimarse y acicalarse al lado de los frailecillos y araos del Atlántico. La integración del ambiente local llega hasta el restaurante Beluga de L'Agapa, donde el chef Michael Tanguy ha creado un menú de delicatessen costeras y platos regionales inspirado en su infancia en el pueblo vecino de Paimpol.

Indicaciones para llegar al hotel:

L’Agapa se encuentra aproximadamente a unos veinte minutos en coche del aeropuerto de Lannion – Côte de Granit Airport (LAI).