AYANA Resort Bali

Si el paisaje de Bali ya es maravilloso al nivel del mar, el panorama que se divisa desde lo alto del acantilado del AYANA Resort Bali te dejará sin respiración. No cabe duda de que, de vez en cuando, merece la pena enfocar (literalmente) las cosas desde otra perspectiva. Puede que ya conocieses el AYANA cuando todavía era el Ritz-Carlton. El hotel ha cambiado de nombre, pero continúa manteniendo las cotas más altas del lujo.


Las habitaciones y suites son bastante lujosas, pero es en las villas, con sus cientos de metros cuadrados y sus piscinas, donde el AYANA despliega todo su esplendor. El diseño es contemporáneo, que no innovador, y su sencillez responde al propósito de no estropear el paisaje natural con detalles isleños kitsch o con un estilo atrevido. Hay vistas espectaculares, y las hay aún más espectaculares, todo depende de lo vertiginosas que sean.


Como puedes imaginar, la experiencia spa en este lugar es de las mejores, y no es en absoluto la única oferta de ocio del hotel. Hay piscinas al pie y en lo alto del acantilado, y la oferta de actividades físicas es de lo más variada, desde ejercicio en el gimnasio hasta ciclismo de montaña, pasando por el golf. Si se cansa de la comida de los siete restaurantes, siempre puede optar por los fastuosos menús particulares del AYANA. Invitamos a los huéspedes a dar con un lugar o una petición que el hotel no pueda atender.