La Reserve Geneve Hotel & Spa

Normalmente los hoteles más importantes de Ginebra son grandes hoteles antiguos y majestuosos, restauraciones de palacios de principios del siglo XX, lugares en los que el único toque de modernidad es la conexión wifi o los televisores de pantalla plana, escondidos en un armario antiguo. La Réserve es la excepción. Gracias a Jaques Garcia diseñador del famoso Hotel Costes, Ginebra cuenta ahora con su propio hotel de diseño moderno, elegante e inspirador.

Su ubicación es única. Mientras que la mayoría de los hoteles se concentran en el río, La Réserve cuenta con 4 hectáreas de parque a orillas del lago, a cinco kilómetros fuera del centro de la ciudad, en dirección al aeropuerto. Esto puede presentar algunas trabas si se quiere ir a hacer turismo a pie, pero sirve para aumentar la sensación de complejo hotelero que ofrece este lugar.

Los interiores son hermosos, con un toque de ostentosidad, que se encuentra ya en los materiales: escritorios de cuero, baños de granito, suelos y muebles de madera noble brillante y gruesas colchas de terciopelo. Los colores son cálidos e intensos, desde los tonos tierra apagados de las paredes, a los intensos rojos, marrones y violetas para resaltar.

Una parte integral del atractivo de La Réserve es su Spa, que ocupa toda una planta. Cuenta con piscina cubierta y piscina al aire libre, así como 17 salas para tratamientos y una peluquería. Hay tres restaurantes en el hotel: Le Tsé-Fung, que ofrece platos de la gastronomía china, galardonado con una estrella MICHELIN en elegantes mesas negras lacadas y sillas de terciopelo rojo; el restaurante-bar Loti, con un DJ todas las noches y música en directo dos noches a la semana; y el Café Lauren, que ofrece cocina saludable en un ambiente relajado y ligero. Además, Le Lodge, un restaurante al aire libre situado en el jardín al lado de la piscina, ofrece sabores mediterráneos e italianos los mediodías en verano.