Widder Hotel

Olvídate de los estereotipos sobre Zúrich. Con su innovador diseño, el Widder desmentirá todo lo que sabes hasta ahora sobre esta ciudad, sin olvidar en ningún momento lo que ha hecho a los hoteles suizos estar entre los más profesionales del mundo.

Su fachada, de aspecto tradicional, resultado de la unión de ocho casas medievales en la parte antigua de la ciudad, al otro lado del río Limmat, no permite adivinar la modernidad de los interiores que alberga el Widder. Cada una de las 42 habitaciones es diferente a las demás, y de hecho, cada edificio tiene una decoración distinta, donde cabe de todo, desde un estilo funcional «de oficina» con encanto, pasarelas metálicas que cuelgan de cables, aires de loft urbano bohemio, con las vigas del techo y la piedra o ladrillos de las paredes a la vista, hasta el barroco más rabioso de la Haus zum Pferch, con sus artesonados y su mobiliario moderno y minimalista.

Todas son agradables para la vista, con un diseño plenamente acabado y comodísimas, sin esquinas en el mobiliario ni en la estructura. Y, por si fuera poco, la eterna hospitalidad suiza, con un equipo de personal amable y eficaz.

En Zúrich existe la pasión por el jazz, así que eso es lo que se escucha en el bar del Widder. Zúrich es una ciudad tranquila, aunque los amantes de otros tipos de música también tendrán opciones de ocio, aunque lo suficientemente alejadas del alojamiento como para poder descansar plácidamente.