Linthwaite House Hotel

Si bien es cierto que en la región de Lake District no faltan ni hoteles ni los famosos bed-and-breakfast ingleses, no hay muchos que puedan competir al mismo nivel que el Linthwaite House. Si a un paraje hermoso donde los haya (en este caso, una casa señorial eduardiana rodeada de cerca de seis hectáreas de bosques y jardines, con vistas al pintoresco lago Windermere) le añadimos unas referencias de estilo envidiables (el hotel describe su estética como «una fusión de Ralph Lauren y Raffles»), obtenemos un resultado realmente único.

Con solo 27 habitaciones, el ambiente es íntimo, aunque con un toque profesional: la línea entre lo formal y lo informal está muy bien definida. Por ejemplo, salta a la vista que la decoración de los interiores ha corrido a cargo de un diseñador, pero esto no impide que sea lo bastante neutra y ecléctica para darle un ambiente acogedor al hotel. Todas las habitaciones están equipadas con reproductores de CD, televisión vía satélite y cuartos de baño modernos.

El restaurante Henrock es el trabajo del restaurador Simon Rogan, un lugar en el que se combinan ingredientes locales con sabores internacionales, mientras que en el invernadero y el salón sirven copas con vistas al lago Windermere. El Linthwaite House también ofrece instalaciones para conferencias y servicios de negocios, pero entre los huéspedes de este hotel se suelen contar más parejas que pasan un fin de semana romántico que grandes ejecutivos de viaje por trabajo. De hecho, el propio Lake District se presta más al romanticismo que a los negocios.