Castille Paris

No hay muchos hoteles parisinos tan céntricos como este, que está situado a la vuelta de la esquina del Ritz y a poca distancia de los Jardines de las Tullerías, los Campos Elíseos y de cualquier lugar de interés que se encuentre en la margen derecha de París, incluido el atelier original de Coco Chanel, que se encuentra justo al lado. Es una ubicación idónea para un hotel parisino clásico como el Castille.

Que conste que, en este caso, «hotel parisino clásico» no es un eufemismo para evitar decir «rococó e incómodo». Las habitaciones del Castille son amplias, y desde la renovación de 2005 su decoración irradia una contemporaneidad de líneas bien definidas y una sencillez que combina con los tejidos estampados, los cuadros del siglo XVIII y XIX, los cuartos de baño de mármol y las fotografías históricas en blanco y negro de la ciudad.

El restaurante L’Assaggio se rinde a las discretas influencias venecianas que revelan los interiores del Castille y está dispuesto en torno a un patio en el que se come al aire libre en verano. Además de un gimnasio y una sauna, el hotel ofrece unas instalaciones sencillas para reuniones y eventos. Sin ser una fortaleza, el Castille dispone de todos los servicios indispensables, a diferencia de muchos hoteles de París. Si sumamos la ubicación privilegiada del hotel, no le falta nada más.