Si buscas un restaurante especial en el centro de Málaga, en la zona de calles peatonales que rodea la Catedral, esta es sin duda una magnífica opción.
El local, que es bastante pequeño y ofrece muy pocas mesas (la mayoría de ellas, de hecho, están sobre la misma calle peatonal donde se encuentra), apuesta por una interesante oferta gastronómica de fusión que combina la creatividad con algunos detalles o rasgos culinarios sudamericanos que nos hablan de Perú, de México, de Argentina...; no en vano, el chef Emi Schobert, que dice buscar su inspiración "en el mar, la montaña y los productos locales", es natural de Buenos Aires y ha representado dos veces a su país en el prestigioso Mundial de Cocina Bocuse d’Or. La propuesta, que muestra una delicadeza constante en las presentaciones, se centra en un único menú degustación llamado Gran Menú Blossom (nos ha sorprendido su Alfajor de molleja, con garbanzo y topinambur). Aquí, dado el tamaño... ¡es absolutamente necesario reservar!