Aleenta Resort & Spa, Hua-Hin

Puede que el éxito turístico de Tailandia radique en la variedad de su oferta: desde la desmesura urbana de Bangkok hasta la tranquilidad de sus apartados rincones naturales o la marabunta de los viajes organizados a las playas más famosas. En Tailandia hay más clases de turismo que en otros países el doble de grandes y ya podemos empezar a acostumbrarnos a otra más: los destinos de lujo de la costa del golfo que se encuentran en los alrededores de la localidad turística de Hua Hin.

El Aleenta se enclava en una playa apacible y espectacular, a 32 kilómetros de Hua Hin. Por lo visto, la antigua villa de veraneo familiar era demasiado perfecta como para no compartirla y, además de multiplicarse en varias villas y suites, acabó por abrirse otro Aleenta en Phuket.

El ambiente, en cambio, continúa siendo como el de una casa de invitados; los demás huéspedes que descansen contigo junto a la piscina podrán ser tanto tailandeses adinerados como turistas extranjeros. Las habitaciones son acogedoras, radiantes y urbanas, y algunas, como la Beach House o la Grand Villa, constituyen un alojamiento de ensueño; más que las típicas suites de hotel parecen apartamentos privados.

No obstante, muy pocas residencias privadas podrían jactarse de tener semejantes spas y un cocinero que ofrezca los resultados de la cocina del Aleenta, en la que cada día se prepara un menú diferente de saludables platos tailandeses y mediterráneos. No son unas vacaciones organizadas ni tampoco se trata de un exilio en una isla desierta sin las comodidades más básicas (a no ser que, para ti, la televisión sea una necesidad básica), sino que representa lo mejor de dos mundos: la comodidad urbana y la tranquilidad de la naturaleza.

Indicaciones para llegar al hotel:

El vuelo de Bangkok al aeropuerto de Hua Hin dura 45 minutos y hay varios al día.