GreenLife Marrakech

En alguna ocasión hemos podido afirmar que quienes viajan a Marrakech solo pueden elegir entre alojarse en la bulliciosa medina o en el barrio de la Palmeraie, algo a las afueras y más residencial. Sin embargo, a las puertas de la ciudad hay una tercera opción … En Ourika, al pie de las montañas del Atlas, nos aguarda GreenLife Marrakech, un pequeño y lujoso eco resort que sabe sacar partido de su ubicación en pleno campo para ofrecer una experiencia extraordinariamente relajante e inmersiva. El nombre puede resultar sorprendente para un hotel y puede que el verde no sea el primer color que nos venga a la mente al pensar en Marruecos, pero cuando haya venido aquí, comprenderá el porqué del nombre y hasta es posible que cambie su percepción de los colores y el país…

Las catorce habitaciones y suites están decoradas en un lujoso estilo tradicional y las vistas desde sus terrazas hacen honor al nombre, tanto las que se asoman al jardín, como las que ofrecen espectaculares vistas de las montañas del Atlas. El espacio, como las comodidades, es abundante y, aunque se trate de un hotel de pequeñas dimensiones, es lo suficientemente grande para disponer de su propio spa con cabinas de tratamientos y hammam tradicional. El almuerzo se lo servirán junto a la piscina y la opulenta cena le hará (re)descubrir los sabores más característicos de la cocina marroquí. Eso sin contar con está a apenas media hora de Marrakech y más cerca aún del campo marroquí: un punto de partida ideal para vivir una aventura en las montañas del Atlas.