Viceroy Santa Monica

El resplandor verde que se ve a través de unos cristales traslúcidos es el único indicio de que tras la discreta fachada (sin rótulo) de este hotel de la costa pueda estar sucediendo algo fuera de lo normal. En el interior, en cambio, la cosa cambia por completo. Los espacios interiores del Viceroy, uno de los lugares más emblemáticos de Santa Mónica, son el paradigma de la elegancia, una versión contemporánea del estilo tradicional de las casas de campo británicas, con una moderna decoración en blanco y negro de líneas bien definidas, que contrasta con el verde fuerte del mobiliario de estilo antiguo, paredes revestidas de papel pintado en colores vivos y piezas de porcelana en el lugar más insospechado: las paredes.

Por desgracia, el grado de refinamiento de un hotel, desde el punto de vista visual, suele ser inversamente proporcional a su calidad pero, desde luego, este no es el caso. Las habitaciones regalan a los huéspedes con placeres como sábanas italianas y edredones de plumón de la mejor calidad, artículos de baño de Thymes y televisores con pantalla plana de 27 pulgadas. Todas las habitaciones tienen balcón, pero merece la pena pagar la diferencia de precio de las que también ofrecen vistas del Pacífico.

Sugar Palm Santa Monica es el deslumbrante bar-restaurante que se encuentra en el interior y el exterior del hotel y sirve comidas, bebidas y tapas en cualquier parte, desde el comedor hasta el jardín y la zona junto a la piscina. La playa está a un corto paseo de distancia, pero es probable que muchos de los visitantes prefieran ir hasta las tiendas, los bares y los restaurantes de Third Street Promenade.