The Old Quay House

Este hotel de Cornualles ofrece lo mejor de dos mundos. Por un lado, el Old Quay House es un hotel pequeño, con sólo doce suites, además de un negocio familiar, dirigido con mimo por Jane y Roy Carson, y al mismo tiempo, ofrece una experiencia extraordinariamente exquisita. Los propietarios no son nuevos en el sector de la hotelería y su experiencia les permite prestar un servicio depurado y crear un ambiente sofisticado, sobrio y de líneas bien definidas.
El edificio se alza sobre las aguas, al borde del río, y siete de sus doce habitaciones tienen balcones privados con vistas al estuario. Algunas habitaciones están decoradas con un estilo minimalista y tonos apagados, mientras que otras son más ostentosas y lucen colores más vistosos, pero todas son suntuosas y lujosas, con su ropa de cama de primera calidad y sus espléndidos y modernos cuartos de baño, surtidos de artículos de baño caros. Sentarse a ver pasar el río es una actividad relajante donde las haya y, puesto que el hotel no admite niños menores de doce años, no hay riesgo de que nadie rompa la tranquilidad casi absoluta de este lugar.
El principal atractivo del hotel son sus acogedoras y cálidas habitaciones, aunque las zonas comunes tampoco le decepcionarán. Hay una terraza al aire libre, en la que los huéspedes disfrutan las vistas del río y la brisa, y en el interior, tienen a su disposición un salón con chimenea. El restaurante Q está abierto al público y ofrece productos de la zona y marisco de Cornualles con influencias de la cocina continental.