Grand Hotel Bagni Nuovi

Hace tiempo que estos bagni dejaron de ser nuovi. Los baños termales de Bormio, que se encuentran en el extremo norte de la zona alpina de Lombardía, llevan siendo una atracción turística por lo menos desde la época del Imperio romano, y el hotel data de 1836. Como destino turístico para extranjeros, puede que el pueblo no esté a la altura de la Toscana, Amalfi y el lago Como. Sin embargo, si el Grand Hotel Bagni Nuovi sirve de referencia, Bormio está a la altura de la hotelería italiana de mayor categoría.

Para empezar, el diseño de los interiores, así como el de las setenta y cuatro habitaciones y suites, es discreto: «moderación» es la palabra clave. Los detalles históricos y el diseño contemporáneo se combinan con una naturalidad típica italiana. Hay amplitud de espacios, y el lujo es evidente. Muchos de los cuartos de baño de mármol blanco están equipados con bañeras de hidromasaje de aguas termales, y la Royal Suite, que fue construida para Vittorio Emanuele III, conserva la antigua bañera de mármol rosa de Candoglia.

En lo que se refiere a las instalaciones, hay tantas que no sabrá cuáles elegir. Además de un comedor espléndido y una cafetería, los huéspedes tienen a su disposición el restaurante del Bagni Vecchi, un hotel del mismo grupo. Lo mismo sucede con el spa: las cabinas de tratamientos del Bagni Nuovi son más que suficientes, pero las del Vecchi contribuyen a la variedad. Hay un servicio de transporte entre ambos hoteles, que también lleva a los huéspedes al telesilla y pone el pueblo a su alcance.

Aviso: el hotel puede exigir una estancia mínima.