Grand Hotel Villa Serbelloni

Las riberas del lago italiano de Como están salpicadas de espléndidos hoteles e imponentes villas que alcanzan cotas de excelencia en todos los sentidos. Líder indiscutible de esta flota de cinco estrellas y situado en la exclusiva localidad de Bellagio, en la punta del promontorio que corta el célebre lago en dos, el Grand Hotel Villa Serbelloni deja claro que el lujo no tienes secretos para él desde que la antigua residencia palaciega de 1873 fuera transformada en hotel de altísima gama.
Su rico legado neoclásico se hace presente en cada rincón, aunque sin llegar a percibirse como algo exagerado o abrumador. La combinación de colores que forma el tejado de tejas y la fachada amarillo canario crea un bello contraste con el verde de la vegetación circundante, algo que pueden apreciar especialmente quienes llegan en barco. En el interior, las zonas comunes son opulentas: los pasos resuenan en las escaleras de mármol y las arañas de cristal cuelgan de techos increíblemente altos. Nada más lejos sin embargo del simple pastiche: no es casualidad que el célebre Bellagio de Las Vegas se llame así en honor a la localidad vecina.
Sus 85 habitaciones varían en tamaño: si las más básicas son espaciosas, la más lujosas resultan inmensas. La decoración es un derroche de motivos neoclásicos, espejos dorados y techos ornamentados, mientras que los muebles son exclusivamente de época, cerrando el paso a todo intruso moderno por elegante que sea. Para completar el cuadro, suntuosas y pesadas cortinas se abren para revelar impresionantes vistas del lago de Como…
Los dos restaurantes del hotel, el Mistral y La Goletta, están dirigidos por el chef Ettore Bocchia, una estrella Michelin y principal representante en Italia de la gastronomía molecular. Para que se relaje de forma activa, el hotel pone a su disposición varias pistas de tenis, un gimnasio y una piscina a orillas del lago. El spa, muy completo, propone un amplio abanico de tratamientos entre los que se incluyen algunos muy exóticos que lograrán impresionar incluso a los más expertos en la materia.