Hotel Sacher Wien

El Hotel Sacher Wien está a punto de cumplir 150 años y se encuentra entre los grandes hoteles antiguos más importantes de la ciudad. Aunque su estilo imperial sigue siendo opulento, su belleza ha envejecido con elegancia. La reputación de su servicio impecable e inigualable sigue intacta, así como la de su famosa tarta Sacher. Aparte de la modernización de los servicios y las tecnologías de las habitaciones, así como de la conversión del ático en una planta con 52 habitaciones adicionales, sigue siendo el mismo Sacher de siempre, pero en su mejor versión.

El diseñador Pierre-Yves Rochon ha sido el responsable de adaptar el interior al siglo XXI y su trabajo es particularmente elegante. Muchas de las habitaciones, así como la mayoría de las suites, tienen vistas al museo Albertina, la Ópera o la Kärntner Straße y, a todos los niveles, están equipadas con grandes y pequeños lujos, desde baños de mármol extravagantes hasta pequeñas delicias de tarta Sacher.

Otra incorporación del siglo XXI es el Sacher Boutique Spa que tardó en inaugurarse, pero que ofrece servicios de la más alta calidad. Y, aunque el Café Sacher Wien, con la tarta que lleva el mismo nombre, es una atracción local, el hotel ofrece mucho más que eso: desde el Rote Bar y el Grüne Bar, dos restaurantes de exquisita gastronomía decorados con un estilo histórico, hasta el Café Bel Étage, un café tranquilo que sirve los excelentes cafés y las famosas tartas de siempre.