Residence Hilda

El peso de la historia de Florencia es tal que a la gente de fuera a veces se le olvida que allí también están en el siglo XXI. No todo es arquitectura renacentista y frescos antiguos; en esta ciudad, como en todas partes, discurre la vida moderna y no sólo hay grandes hoteles tradicionales de cinco estrellas, sino también pequeños hoteles contemporáneos, como el Residence Hilda.

Si el Hilda se considera el polo opuesto de los grandes hoteles, no es sólo por su diseño. Para empezar, este sitio apenas si parece un hotel. Sólo cuenta con doce habitaciones, no tiene zonas comunes y los servicios, reducidos al mínimo, permanecen en un segundo plano: es un lugar idóneo para un tipo de huésped que no requiere continuas atenciones.

Este antiguo edificio de apartamentos convertido en hotel se enclava en una calle lateral, al norte del Duomo: una ubicación idílica tanto para los turistas y las personas que vienen a hacer compras, como para quienes están en Florencia por negocios. Las suites son coquetas y modernas, decoradas con muebles de diseño contemporáneos y una relajante gama de colores crema. Las ventanas dobles aíslan las habitaciones del ruido de la calle y, desde ellas, se dominan los pintorescos tejados rojos de la ciudad. Todas las habitaciones tienen una cocina completamente equipada, pero los huéspedes no tienen por qué cocinar: siempre pueden comer en alguno de los múltiples restaurantes de la zona o pedir que les lleven la comida al hotel.