Hotel Capo d'Africa

Roma es sinónimo de historia y muchos de sus hoteles son señoriales y tradicionales; aunque también hay excepciones tales como el Aleph o el Es, que se encuentran en el extremo opuesto y constituyen la máxima expresión del Diseño, con mayúsculas. La brecha que existía en el panorama hotelero entre la opulencia clásica y la elegancia vanguardista era cada vez mayor, pero ha sido salvada por el Hotel Capo d'Africa con bastante acierto, lo que demuestra que en el término medio puede estar la virtud.
El edificio tiene historia, aunque no tanta como las ruinas que se encuentran al final de la calle; el que antiguamente fuera una escuela de principios del siglo XX, ahora conserva la sencillez de su fachada, con sólo dos palmeras que flanquean la entrada, confiriéndole un toque de elegancia. En cambio, los interiores se caracterizan por su modernidad, aunque también por la sencillez de ésta; más que diseñados, han sido decorados, teñidos de una gama de colores alegre, conservando siempre el buen gusto, con unos muebles modernos, a la par que funcionales.
El personal es agradable y atento —lo más probable es que le ofrezcan una taza de café antes de que haya pasado cinco minutos en este lugar— y las instalaciones también son acogedoras, con detalles tales como la conexión a Internet de banda ancha o un gimnasio bien equipado. Las habitaciones son amplias, con techos altos, están decoradas con elegancia en colores vivos y cálidos e incluyen muebles sobrios y detalles en maderas claras.
La terraza de la azotea y la tranquilidad del barrio, a sólo unas manzanas al este del Coliseo, merecen una mención especial. En realidad, ningún lugar de esta ciudad en rápida expansión puede considerarse verdaderamente céntrico y, por lo tanto, el hotel está tan bien situado como cualquier otro, con la ventaja de que este lugar no está abarrotado de turistas. Es cierto que hay hoteles más grandiosos y más espectaculares que el Capo d'Africa, y, desde luego, su diseño no es comparable al de otros hoteles más atrevidos; pero muchos creemos que este hotel cuenta con un equilibrio perfecto.