Baglio Occhipinti

En el campo siciliano a las afueras de Ragusa hay una finca vinícola de 25 acres, Baglio Occhipinti, que, además, es un complejo de agroturismo. Pertenece a una familia y ha sido maravillosamente modernizado por Fausta Occhipinti, una arquitecta paisajista formada en París que regresó a casa para supervisar la transformación del Baglio de una granja a un hotel y, ahora que su trabajo ha terminado, gestiona el funcionamiento y recibe a los huéspedes.

Desde el exterior, es una finca agrícola típica siciliana, con sus desordenados edificios de piedra tosca rodeados de olivares y viñedos. Los interiores tienen toques contemporáneos, pero sin perder nunca su esencia de granja del siglo XVII. El Baglio carece de las distracciones típicas de un hotel, como televisores y minibares. Las comodidades que ofrece son de la máxima calidad, pero son las de una casa rural, no las de un hotel corriente.

Naturalmente, la gastronomía es el principal atractivo del Baglio, ya que el agroturismo no consiste solo en ver las plantas crecer, sino también en probar sus frutos. El desayuno se elabora con huevos y productos de panadería locales, además de frutas recogidas en los frutales de la finca. La comida puede disfrutarse en el hotel o en un pícnic y la cena, que debe reservarse con antelación, consta de un menú de seis platos. Los aperitivos que se ofrecen al borde de la piscina o en la terraza te alegrarán el día, y la lista de vinos incluye productos de Occhipinti, así como de otros productores de Sicilia y del resto de Italia.