Chablé Maroma

Al Chablé Resort & Spa original no le faltaba nada, estrictamente hablando: es difícil fallar cuando se tiene un resort de lujo opulento, pero con buen gusto, y con un enfoque hacia el bienestar y mucha sensibilidad ecológica y cultural. Pero su localización en la profundidad de la selva yucateca hace que los huéspedes playeros carezcan de una forma de complacer ese gusto. Por supuesto, un hotel solo no puede tenerlo todo, pero el segundo Chablé llegó donde el primero no pudo: concretamente, a Punta Maroma, en la Riviera Maya, justo al norte de Playa del Carmen.

El Chablé Maroma, aparte de estar junto al mar, comienza donde su hermano termina, con lujosas villas individuales, una inspirada combinación de encanto artesanal y manual con construcción exterior en tradicional piedra y madera, y lujosas comodidades modernas tipo boutique. Cada una brinda terraza privada y piscina de inmersión, con los espacios interiores y exteriores perfectamente vinculados. Lo que es útil, dado que está a pocos pasos de los casi 200 metros de playa caribeña privada.

En el paquete del Chablé también se incluye un spa debidamente espléndido, con tratamientos propios para el sector, ya que rinden tributo a la cultura Maya local. Y la cocina también se adapta a la Riviera Maya. En él se sirven almejas, ceviche y otras delicias yucatecas.