Kempinski Hotel Taschenbergpalais

Si conoce la historia de Dresden, entenderá por qué la reconstrucción de un palacio barroco del siglo XVII es un motivo de orgullo tan auténtico como un palacio barroco del siglo XVIII que no ha sido reconstruido. En cualquier caso, actualmente el Taschenbergpalais es el mejor hotel de lujo de la ciudad, y la bandera del grupo Kempinski ondea sobre sus doscientas habitaciones y suites.


Su ubicación es ideal: el hotel se encuentra en pleno casco histórico de Dresden, rodeado de lugares de interés cultural, como el teatro de la ópera y el palacio Zwinger. La fachada del palacio se reconstruyó con esmero y rigor histórico, mientras que los interiores lucen un estilo un poco más contemporáneo, obra de la empresa sueca Living Design. Por otro lado, las habitaciones ofrecen todas las comodidades de un edificio moderno: suelo radiante en los cuartos de baño de mármol, una buena dosis de tecnología punta y amplitud de espacios.


Redondean la oferta de servicios un par de restaurantes excelentes, un spa ultramoderno con centro de salud y todas las instalaciones para reuniones que pueda necesitar. Si dijésemos que se respira el ambiente aristocrático del siglo XIX, no crea que estaríamos exagerando demasiado: al fin y al cabo se alojará en una habitación del edificio más prestigioso de la ciudad.