Canne Bianche Lifestyle & Hotel

Apulia, como sabrá, está viviendo su momento de gloria: de repente, se ha convertido en el destino fetiche de todos esos viajeros que anhelan dejarse deslumbrar por una intensidad y una luminosidad que la clásica escapada toscana no les puede proporcionar (observe que el uso de palabras como “deslumbrar”, “intensidad” y “luminosidad” no es en absoluto casual). El Canne Bianche Lifestyle Hotel pretende, como su nombre indica, ser algo más que un elemento más en la lista de hoteles boutique que salpican el llamado talón de la bota.
Pero, ¿qué en qué se basa exactamente ese estilo de vida que el Canne Bianche promete? En la sencillez, la elegancia, la buena comida y en largos días para tomar el sol en una tranquila playa. El hotel, con 53 habitaciones y justo a orillas del Adriático, es el tipo de lugar al que uno llega y, una vez que tiene la llave, se olvida de todo lo demás. En él encontrará todo lo que pueda necesitar: tiene acceso a la playa, una hermosa piscina con vistas al mar, un encantador bar de cócteles, baño turco y, por supuesto, un excelente restaurante, el T_imo, en el que le aguarda una cocina de gran calidad inspirada en las tradiciones culinarias de la región (entiéndase unos pescados increíblemente frescos, pastas caseras, tomates madurados al sol y recién cortados de la mata y la obligada carta de vinos de la zona).
Las habitaciones y suites, decoradas con tonos y texturas naturales inspirados en el paisaje de Apulia, son tan tranquilas como cabe imaginar. Los baños, revestidos de mármol italiano, están equipados con bañera de hidromasaje o ducha a ras de suelo. Las comodidades estándar incluyen televisores LCD de 32 pulgadas, conexión inalámbrica a internet gratuita y minibar con productos regionales. El hecho de que cada habitación disponga de su propio balcón o terraza es otro de los puntos a destacar. Opte por una suite y tendrá a su disposición una terraza con vistas al mar y tumbonas. Esa zona de estar al aire libre forma parte del estilo de vida del Canne Bianche, lo mismo que el elegante desayuno continental con su café bien cargado y sus dulces recién salidos del horno. Llegada la noche, y con ella la hora del aperitivo, un Aperol Spritz le hará comprender mejor que nuestras palabras en qué consiste este ritmo de vida.