Freehand Los Angeles

No quisiéramos que se nos malinterpretara. No es que consideremos que las aperturas en Miami y Chicago hayan sido meros ejercicios de calentamiento para Freehand: ambas son grandes ciudades y grandes destinos por derecho propio, pero Los Ángeles es la prueba de fuego para todo hotelero y cuando una mini cadena como Freehand elige el centro de Los Ángeles para abrir su tercer hotel, las expectativas tienden a ser elevadas.

Busca el enorme letrero de neón «Commercial Exchange». Cuando lo veas —será fácil, con 12 pisos de altura es el mayor de la ciudad— habrá encontrado el antiguo edificio de oficinas hoy renovado en el que la editorial Edgar Rice Burroughs tenía su sede. Una suite con su nombre situada en la última planta ofrece inmejorables vistas panorámicas del centro de Los Ángeles, aunque, si buscas algo más pequeño y acogedor, opta por una habitación de categoría King, un estudio o una suite: seguirás teniendo excelentes vistas y podrás disfrutar de toda la panorámica desde la piscina de la azotea.

¿Vienes con un grupo de amigos o con una gran familia? Opta por las habitaciones compartidas con literas. Fíate de nosotros: tendrás mucha más privacidad de la que piensas. Dicho esto, elijas la habitación que elijas, la decoración será hogareña y muy en el estilo de Los Ángeles. El estudio Roman & Williams ha decorado estas amplias estancias con maderas oscuras sobre paredes de color crema, grandes ventanas por las que entra mucha luz y obras de artistas de Los Ángeles adornando las paredes.

El equipo de Freehand se ha esforzado para que su establecimiento más reciente pueda ofrecer una experiencia 100 % local. Pese a ello, han hecho una excepción y se han traído hasta aquí el bar de cócteles Broken Shaker que tan popular se ha hecho en Miami y Chicago y que tantos premios y nominaciones ha acumulado (incluido el quedar finalista en el James Beard Award). Combinado con la animación que reina en el restaurante del hotel, The Exchange, estamos seguros que se convertirá en un polo de atracción para las gentes de la zona, algo que siempre es buena señal.