LOISIUM Wine & Spa Resort Langenlois

Cuesta recordar la aciaga era anterior a la vinoterapia, en la que el vino y los tratamientos de spa se tenían que disfrutar por separado. Ahora, en cambio, juntos es como mejor se gozan. Además, hoy en día, no hay una región vinícola sin su correspondiente hotel balneario de lujo ultramoderno; como el Loisium, que se encuentra en el pueblo de Langenlois, enclavado, a su vez, en el valle del Kamp, una zona vinícola de la Baja Austria.
Esta tendencia ha dado lugar a la aparición de una arquitectura de vanguardia, y la del Loisium no es una excepción. El edificio del arquitecto norteamericano Steven Holl es absolutamente singular. Las construcciones del hotel y el spa, con sus capas de aluminio ligeramente abolladas, se alzan sobre los viñedos.
Los interiores también son modernos, aunque un poco menos imponentes. Las habitaciones y suites abiertas ostentan sorprendentes formas geométricas, y su estilo es mucho más moderno y elegante que el que suele caracterizar a los hoteles balneario. La carta del restaurante Vineyard se compone de platos sencillos y modernos, arraigados en la agricultura de la Baja Austria y acompañados de esos vinos que constituyen la razón de ser del lugar.
El Aveda Wine Spa de mil metros cuadrados bien podría ser el principal atractivo del hotel, con su gimnasio y su piscina exterior climatizada de veinte metros. Si de la vinoterapia, le sobra la terapia, no dude en hacer la ruta de las bodegas: las bodegas de 900 años se encuentran justo debajo de este hotel del siglo XXI.