Beniya Mukayu
La experiencia se compone de una inmersión en un apacible entorno natural, seguida de una inmersión –esta vez en sentido literal– en los baños onsen (cada habitación dispone de su propio baño termal al aire libre) y rematada por una opulenta comida kaiseki de varios platos. La biblioteca contiene volúmenes en los que se catalogan las variedades de musgos y líquenes de la propiedad: detalles así nos hacen pensar cuán lejos están aquí de la mentalidad occidental y de su culto de la inmediatez… Los escogidos muebles contemporáneos que se ven no logran desdibujar la apacible estampa y, si los arquitectos occidentales se empeñan en utilizar metáforas de la filosofía zen para defender el atractivo del diseño interior minimalista, el Beniya Mukayu es la prueba de que ambas corrientes están más cerca de lo que podríamos pensar.
Atención: El hotel no acoge a menores de 7 años.
Cómo llegar: El trayecto desde el aeropuerto de Komatsu (KMQ) hasta Beniya Mukaya dura unos 30 minutos en coche. El hotel ofrece traslados de ida y vuelta al aeropuerto de Komatsu, así como un servicio de transporte gratuito de ida y vuelta a la estación de tren de Kagaonsen.
Localización
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