Aman Venice

Por primera vez, Aman se instala en una ciudad (en pleno centro, además) y por primera vez, también, opta por instalarse en un edificio ya existente –un palacio renacentista meticulosamente conservado en este caso– en lugar de hacerlo en un edificio de nueva construcción. Ya sabemos que en Venecia no puede ser de otra manera, pero qué placer comprobar que las cosas se hacen desde el respeto: aparte de alguna sutil pincelada contemporánea aquí y allá y de la abundancia de muebles de la firma de diseño B&B Italia, el lugar se mantiene más o menos como lo pudieron concebir los mercaderes que lo habitaron por vez primera.

Quienes conocen Aman saben que las estancias sólo pueden ser de primera categoría, con todos los equipamientos modernos imaginables mezclándose con los detalles de época. Las mejores ofrecen vistas al Gran Canal, pero ninguna como la que ofrece la Suite Canal Grande, justo encima de la entrada principal del palacio.

Al tratarse de Venecia, las actividades propuestas se apartan un poco de lo que viene siendo habitual en los hoteles del grupo. Su cocina italiana pone el foco en los pescados y mariscos de la laguna y en propuestas de raíz regional basadas en la filosofía “del campo a la mesa”. El spa, por su parte, se esconde en un edificio contiguo en lugar de surgir en lo más alto de algún acantilado y, en vez de proponer salidas para bucear o montar a caballo, el Aman Venice se centra en su entorno urbano y deja las excursiones en manos de chefs, historiadores del arte o escritores para que cada cual pueda descubrir Venecia desde la perspectiva que más le interese.

Cómo llegar: El Aman Venice se encuentra a unos 5 km de la estación de tren de Santa Lucía y a 18 km del aeropuerto internacional de Venecia-Marco Polo (VCE). Sea cual sea el medio de transporte, los huéspedes serán recibidos por el personal de Aman y trasladados al complejo a través de los canales de Venecia.