Hotel Vilòn

Al igual que muchos de los hoteles boutique más elegantes de Roma, el Hotel Vilòn trata de ofrecer no solo el servicio y la comodidad de un lujoso hotel boutique, sino también encanto residencial e intimidad. Su ubicación, en una casa del siglo XVI pegada al Palazzo Borghese en el centro histórico de la ciudad, es romántica y está cerca de muchas de las atracciones turísticas más conocidas. Sin embargo, en ningún momento da la sensación de ser un hotel céntrico y Villón, una vez en su interior, el silencio es casi monástico.

De hecho, durante gran parte del siglo XX, la casa ha sido un convento y, en la actualidad, tiene solo 18 habitaciones, cada una de las cuales ha sido reformada por el arquitecto Giampiero Panepinto y decorada por el diseñador de cine Paolo Bonfini. El resultado es, sorprendentemente, muy cinematográfico. Cada ángulo está lleno de un interés visual procedente de la elección de colores idiosincráticos, los muebles vistosos y las numerosas obras de arte. Las habitaciones parecen exquisitamente residenciales, con vestidores, aperitivos y bebidas gratuitos en el minibar, grandes duchas de efecto lluvia y vistas sobre los jardines privados del Palazzo Borghese.

En un hotel romano de este nivel cabe esperar un excelente restaurante, y el Hotel Vilòn no defrauda: el Adelaide Ristorante & Salotto sirve platos italianos de temporada que rinden homenaje a la tradición particular de Roma en un comedor, una terraza exterior y un elegante bar.