The One Barcelona

En Barcelona hay muchos excelentes hoteles; después de todo, esta ciudad maneja una impresionante cantidad de turismo. Entonces, ¿por qué este se autotitula The One (es decir, el elegido)? Bien, para nosotros, no hay mejor localización en Barcelona que la de este hotel: el punto en que dos de los mejores vecindarios se encuentran. Por un lado está el Eixample, un arbolado distrito residencial al sur de la Avenida Diagonal, fuera de las típicas rutas turísticas. Y al norte se encuentra Gràcia, alegre, actual, y donde la juventud de Barcelona vive y se entretiene. Podrás llegar a pie a las principales atracciones: el Parc Güell de Gaudí, la catedral de la Sagrada Familia y el barrio gótico, pero la base estará entre la gente local y esa ventaja es única.

Mientras te alojes aquí también estarás muy a gusto en el interior. The One ciertamente luce como el hotel de cinco estrellas que es. En todo el hotel y sus 89 habitaciones hay mucho mármol, espejos y detalles dorados concebidos elegantemente, obra del diseñador Jaime Beriestain, cuyo estudio también creó gran parte del mobiliario. En las paredes hay muchas obras de arte dramáticas y coloridas, pero lo que más se destaca visualmente son las ventanas de suelo a techo que permiten a los huéspedes observar el vecindario con todo lujo de detalles. Las habitaciones cozy de nivel básico hacen honor a su nombre y están muy bien diseñadas. Las habitaciones de categorías superiores están entre las más lujosas del área, con terrazas privadas y vistas espectaculares de la Sagrada Familia. Sin embargo, si buscas contemplar el panorama de la ciudad, ve directo a la azotea y a su piscina, que brinda perspectivas despejadas del horizonte de Barcelona: en un instante recordarás por qué en una ciudad con tantos buenos hoteles, The One es el elegido.